"Lo rural goza de menores privilegios que lo urbano y por ello los profesionales se implican más con el paciente"

Cayetano Pérez cuenta con más de 35 años de experiencia, una larga trayectoria en la que ha desarrollado diferentes perfiles dentro del sector farmacéutico. Su paso por el laboratorio como especialista de análisis clínicos, por la industria farmacéutica y por la universidad, le ha servido para obtener un mayor conocimiento de la oficina de farmacia Su botica está ubicada en el puerto de Mazarrón, en la costa murciana, y a ella acuden usuarios de lo más diversos, puesto que su actividad depende directamente de la estación del año. “Nuestra farmacia es muy especial; durante casi todo el año actúa como una oficina rural, mientras que los meses de verano se convierte en una farmacia turística. De ahí que contemos con un stock variado que nos permita dar respuesta a las necesidades de nuestra clientela heterogénea”.

Cayetano decidió en 1981 abrir su propia farmacia, labor que actualmente compagina con la de investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Murcia. Su vocación social le llevó a desarrollar una importante labor dentro de la farmacia rural, que según Cayetano requiere de una mayor dedicación y entrega que la oficina ubicada en centros urbanos. “Lo rural goza de menores privilegios que lo urbano. Por ello los profesionales locales se implican más con el paciente. No en vano, el usuario rural suele presentar mayores necesidades relacionadas con la salud y en muchos casos se trata de personas que padecen algún tipo de enfermedad crónica. Por el contrario, el paciente turístico es más nervioso y exige respuestas inmediatas a causa de la masificación de servicios y la superplanificación del tiempo libre”.

Firme defensor del sistema sanitario español, destaca el perfil complementario que ofrece la farmacia actual. “La evolución de la farmacia se ha encauzado de forma correcta, de manera que enriquece y fortalece a la Atención Primaria, al mismo tiempo que incrementa la atención  y educación del paciente, y la eficacia y la seguridad del fármaco”. En cuanto a las nuevas tendencias, Cayetano afirma que, a pesar de que la especialidad farmacéutica es la razón de ser de la oficina de farmacia, están surgiendo nuevos productos que requieren de formación y especialización, y que complementan la atención farmacéutica. “Cada día se cuida más la higiene, la belleza y, por ende, la salud. Estos nuevos servicios están al alza, ya que en la actualidad el usuario busca remedio a todo, en especial aquello que está íntimamente relacionado con el ideal de belleza y el bienestar puesto que ayuda a incrementar su autoestima”.

Dichos servicios se centran, sobre todo, en la especialización en diferentes áreas, y constituyen el sello de identidad de la botica. “La diversidad y la calidad de servicios identifican a la oficina de farmacia. Esto explica que se hayan ido incorporando nuevos productos de manera progresiva, y que hoy en día éstos ostenten un porcentaje considerable con respecto a los  medicamentos.Temas relacionados con la preparación del enfermo en pruebas diagnósticas y quirúrgicas, trascripciones analíticas o campañas sanitarias, son ya muy habituales en la farmacia”.

En esta labor de formación, el COF de Murcia desempeña una labor fundamental. “La oferta colegial murciana cubre todas las expectativas de los profesionales. Por ejemplo, nosotros estamos apostando fuerte por la cosmética y nos compete estar especializados. Dicha preparación la encontramos en el COF, las facultades y las distintas asociaciones”.

Por último, Cayetano se despide de nosotros augurando un futuro brillante para la farmacia. “Se deben tomar medidas como el establecimiento de una sanidad racionalizada, a la par que justa y eficiente, que impliquen responsabilidad y compromiso, tanto por parte de los profesionales, como de los agentes políticos. Sólo así seremos capaz de dar respuesta a las necesidades que nos plantea la sociedad”.