En la actualidad, los farmacéuticos valencianos se encuentran a la espera de hacer efectiva la sentencia firme de fecha 2 de diciembre de 2015, en la que se condena a la administración al pago de los intereses ocasionados por el retraso en el pago de las facturas desde 2008 a 2011.
La Comunidad Valenciana cuenta con 7.142 colegiados, de los cuales 794 pertenecen a la provincia de Castellón. La situación de la farmacia sigue siendo crítica a nivel autonómico, tal y como describe Sergio Marco, presidente del COF Castellón. “Venimos de una situación insostenible de impago, y actualmente todavía no estamos ...
La Comunidad Valenciana cuenta con 7.142 colegiados, de los cuales 794 pertenecen a la provincia de Castellón. La situación de la farmacia sigue siendo crítica a nivel autonómico, tal y como describe Sergio Marco, presidente del COF Castellón. “Venimos de una situación insostenible de impago, y actualmente todavía no estamos al día, pero cobramos regularmente. Esta situación lleva a una falsa percepción de recuperación. Además, en el nuevo escenario del copago en la Comunidad Valenciana, desde enero, los colectivos más desfavorecidos no pagan aportación. En total, en la Comunidad Valenciana se estima que serían aproximadamente unos 42 millones de euros que dejarán de percibir las farmacias directamente. Pasarán a cobrarlo cuando cobren la totalidad de la factura. Es otro peso financiero que debe soportar la farmacia. A la farmacia rural con menor volumen de venta libre, se le está exigiendo un mayor esfuerzo financiero. Esta situación es extrapolable a farmacias urbanas con volúmenes de ventas bajos”.
Desde el COF defienden que la sanidad pública tiene muchos frentes para hacer efectiva la disminución del déficit. En primer lugar, mediante políticas preventivas sanitarias, donde el farmacéutico tiene mucho que decir. En segundo, controlar las partidas de farmacia hospitalaria. “El tercero, dejar de actuar unilateralmente sobre la farmacia comunitaria, en forma de órdenes de precios de referencia, decretos de reducción de márgenes, etc. A través de la reinvención, se está intentando demostrar a la administración el papel que desempeña el farmacéutico. Hay mucho que hablar y debatir en este sentido. Un foro en el que se debatirá será en el próximo 20 Congreso Nacional Farmacéutico que se celebrará en Castellón del 19 al 21 de octubre”.
Futuro
A pesar de los muchos condicionantes, el presidente es optimista sobre el futuro. “El futuro depende de nosotros. Y creo que estamos debatiendo y trabajando en numerosos frentes para ello. La remuneración de servicios es fundamental. El margen que obtenemos de los medicamentos cada vez es menor, y no podemos dejar de valorar nuestro propio trabajo. Hay que desarrollar servicios farmacéuticos, enseñarle a la administración su utilidad y valor, y por supuesto, cobrar por ellos”.
Como retos más actuales, cita el terminar el proceso de interoperabilidad de la receta electrónica en todo el territorio español, así como poder incorporar a la receta electrónica las recetas de las consultas privadas. “También estamos trabajando con la receta electrónica veterinaria”, menciona Marco, “y como colofón, un proyecto que por fin unirá a todos los estamentos farmacéuticos que trabajamos con o para la administración sanitaria. El proyecto “Concilia” conectará los servicios de farmacia hospitalaria con la comunitaria para poder intercambiar información, con el fin de que el paciente este mejor atendido y controlado en lo que a medicación se refiere”.
