A ello contribuyeron una mayor estabilidad del sector, la existencia de una demanda superior a la oferta, mayor facilidad crediticia e intereses bancarios bajos.
Según Asefarma, asesoría de gestión especializada en oficinas de Farmacia, 2016 fue un año activo para el sector de la compraventa de farmacias. Prueba de ello fueron el aumento de la demanda de oficinas a comprar y el alza de sus precios. Como perfil del farmacéutico candidato a comprar se ...
Según Asefarma, asesoría de gestión especializada en oficinas de Farmacia, 2016 fue un año activo para el sector de la compraventa de farmacias. Prueba de ello fueron el aumento de la demanda de oficinas a comprar y el alza de sus precios. Como perfil del farmacéutico candidato a comprar se mantuvo el tipo de profesional que surgió con la crisis. Se trata de una persona generalmente situada entre los 40 y 50 años de edad y que tuvo que dejar su puesto en la Industria farmacéutica, por un ERE u otro tipo de extinción contractual. Esto le facilitó la liquidez suficiente en forma de indemnización, dándole también la posibilidad de adquirir una farmacia como forma de reorientar su carrera. No obstante, también existe el perfil de comprador que dejó la industria por decisión propia y para dedicarse al trabajo de farmacéutico propiamente dicho, como destacaron este lunes, 2 de enero, Paloma García-Mauriño, directora comercial de Asefarma, y Pia Sarralde, responsable en la firma en lo tocante a compraventas de farmacias.
Junto a los dos perfiles identificados arriba, también existe el del farmacéutico que ya es titular de una farmacia, pero desea cambiar a otra. Esto se debe, fundamentalmente, a que se quiere optar a una facturación más elevada, una mejorar la calidad de vida profesional o disfrutar de un local más amplio. Esta tipología se completó, según los responsables de Asefarma, con aquellos farmacéuticos que llevaban tiempo sopesando la posibilidad de ser titulares y finalmente se han decidido, además del perfil clásico del continuador de una saga familiar dedicada a su oficina de Farmacia.
Para la asesoría no sólo ha variado el farmacéutico comprador, sino también los precios que tiene que satisfacer. Durante 2016 se observó la subida de dichos precios, respecto a años anteriores. En ejercicios precedentes el coste de comprar una oficina de Farmacia se situaba alrededor del 1,2 ó 1,3 de su facturación anual, mientras que el año recién concluido esa horquilla subió al 1,5, e incluso, 2 de dicha facturación anual. No obstante, el mejor indicador observado fue el incremento en el precio de las licencias, entendidas como el derecho a ejercer la actividad de farmacia. Estas se suelen adquirir para llevar a cabo un traslado de la oficina de Farmacia, que por otro lado, suele responder a un tipo de botica de baja facturación, poco recorrido, etc. En 2014 las licencias se vendían a 300.000 euros, subiendo a 395.000 a comienzos de 2015, y pasando a costar 525.000 al finalizar 2016. Para Asefarma, la previsión de cara a los primeros meses de 2017, es que estos precios prosigan su alza moderada, tanto para las farmacias como para las licencias. Parámetros que habrá que vigilar junto a otros indicadores importantes a la hora de fijar el precio de una oficina, tales como los horarios, el personal, su porcentaje de Venta Libre y el SOE, el recorrido de la farmacia, la zona en que se encuentre ésta ubicada, el tamaño del local o el alquiler que tenga éste, entre otros.
En líneas generales, los especialistas de la asesoría estimaron que resultaron más atractivas las farmacias con más venta libre que las que dependen demasiado de los fármacos financiados por el SNS. Cada vez más, el farmacéutico quiere más zona de exposición, más espacio de salud y consejo al cliente. Quiere convertir su botica en un lugar para la promoción de la salud y la prevención de enfermedades, en opinión de Pía Serralde. De ahí que la farmacia más deseada en 2017 pudiera seguir siendo aquella que tenga una facturación media, un horario de 8 horas, cierto recorrido y amplitud de local. Suponiendo menores opciones de adquisición a las oficinas con locales pequeños, por su dificultades para ampliar sus servicios para la promoción de la Salud.
En resumen, la firma que preside Carlos García-Mauriño, concluyó que la fase expansiva del mercado de compraventa de oficinas de Farmacia se debió en 2016, y seguirá debiéndose en 2017, a la estabilización del sector, el aumento de la demanda sobre la oferta existente y a una mayor facilidad para acceder al crédito de entidades financieras a intereses bancarios reducidos. Las conclusiones señaladas por Asefarma se sostienen en su actividad empresarial prestada durante 2016 a las 300 oficinas de Farmacia que componen su cartera.
Pie de Foto: Carlos García-Mauriño, presidente de Asefarma
