Según un estudio realizado por Expert Panel on Effective Ways of Investing in Health (EXPH) a nivel europeo, los modelos de farmacia liberados ofrecen buenos precios, menos tipo de asesoramiento con el paciente y más trabajo para el farmacéutico.
La competencia entre los proveedores de servicios de salud en la Unión Europea ha sido el objeto de un extenso estudio por parte de la Unión Europea. Tomándola como un instrumento pensado para mejorar la eficiencia en los sistemas de salud, un panel de expertos sobre inversión en salud de ...
La competencia entre los proveedores de servicios de salud en la Unión Europea ha sido el objeto de un extenso estudio por parte de la Unión Europea. Tomándola como un instrumento pensado para mejorar la eficiencia en los sistemas de salud, un panel de expertos sobre inversión en salud de la Comisión Europea ha determinado cuál es la situación actual en cuanto a la liberalización de la farmacia y cuál es la hoja de ruta para mejorar el sistema.
En el caso de las farmacias, éstas están en general protegidas por ciertas restricciones, en base a la densidad de población y a la distancia geográfica. Unas restricciones más laxas ha generado una mayor competencia, lo que en última instancia generaría beneficios para los pacientes.La objeción más común a la liberalización de la farmacia comunitaria es la peor calidad de servicio que ésta ha conllevado, algo observado en la mayoría de países europeos que, en cambio, son capaces de ofrecer diferentes respuestas a otros factores.
Otro de los miedos que la liberalización puede acarrear es la aparición de una estructura oligárquica. Así está sucediendo en Noruega, donde sólo tres cadenas farmacéuticas controlan el 81% del mercado tras la liberalización de su farmacia, sin duda uno de los grandes síntomas aparentemente naturales tras una desregulación, y que debe atajarse desde sus inicios para promover un sistema sano.
Tras el análisis de pros y contras, parece claro es que existen unos elementos clave para considerar la actual y futura competencia en este sector. Estos son asegurar una transparencia en el mercado –con disponibilidad de información en calidad y precios–, una evaluación cuidadosa de los efectos del acceso y de la equidad, promover el conocimiento del cuidado de la salud, y reforzar las reglas de competencia para prevenir el abuso de las posiciones dominantes.
