Según una reciente encuesta del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) realizada a 2.400 personas, más de la mitad de los encuestados aseguran confiar en el farmacéutico y acudir a una farmacia en caso de resfriado. De hecho, un 25% de ellos declara resfriarse entre tres y cuatro veces al ...
Según una reciente encuesta del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) realizada a 2.400 personas, más de la mitad de los encuestados aseguran confiar en el farmacéutico y acudir a una farmacia en caso de resfriado. De hecho, un 25% de ellos declara resfriarse entre tres y cuatro veces al año. Además, en la mitad de los casos, el dolor de garganta es el primer síntoma que sufre la mayoría de españoles al resfriarse. La doctora Consuelo Ortega, otorrinolaringóloga del Hospital Infanta Sofía de Madrid, señala los motivos porque esta es la primera parte del cuerpo afectada: "Es la vía de entrada de múltiples infecciones en el organismo. Por ello, como primer síntoma se va a producir una inflamación de la mucosa que recubre la faringe, lo que va a causar dolor, sequedad, incomodas molestias o incluso dificultades para tragar, ronquera o disfonía".
La experta recomienda seguir una higiene preventiva y tomar preparados farmacéuticos a base de própolis para fortalecer las defensas y tratar las afecciones de garganta, "por sus efectos calmantes". Según la encuesta de INFITO, uno de cada cuatro españoles recurre a esta sustancia natural producida por las abejas para cuidar la garganta. Por otro lado, podrían jugar un papel interesante en la prevención de los cuadros catarrales y resfriados gracias a un posible efecto inmunomodulador, "que permitiría mejorar las defensas para evitar la infección respiratoria", subraya.
El hecho de que los resfriados se produzcan varias veces al año sucede porque "es una enfermedad que cursa en brotes. Suele aparecer un primer episodio en otoño, otro durante el invierno y otro en primavera", comenta la doctora Ortega. Además, admite que el invierno "es la época más propicia para el contagio, pues solemos permanecer más tiempo en espacios cerrados con mayor aglomeración de gente". Esta especialista advierte de la importancia de distinguir los síntomas del catarro de los de una gripe para tratarlos de forma adecuada. "En el primer caso, se desarrollan de forma más paulatina y progresiva, con congestión nasal o dificultad para respirar, rinorrea, tos, estornudos y es rara la presencia de fiebre, aunque puede haber febrícula", indica. Por su parte, añade, la gripe "es un cuadro más grave, con fiebre alta e inicio más brusco, dolor de cabeza, malestar general importante y dolor muscular y corporal".
El hecho de que los resfriados se produzcan varias veces al año sucede porque "es una enfermedad que cursa en brotes. Suele aparecer un primer episodio en otoño, otro durante el invierno y otro en primavera", comenta la doctora Ortega. Además, admite que el invierno "es la época más propicia para el contagio, pues solemos permanecer más tiempo en espacios cerrados con mayor aglomeración de gente". Esta especialista advierte de la importancia de distinguir los síntomas del catarro de los de una gripe para tratarlos de forma adecuada. "En el primer caso, se desarrollan de forma más paulatina y progresiva, con congestión nasal o dificultad para respirar, rinorrea, tos, estornudos y es rara la presencia de fiebre, aunque puede haber febrícula", indica. Por su parte, añade, la gripe "es un cuadro más grave, con fiebre alta e inicio más brusco, dolor de cabeza, malestar general importante y dolor muscular y corporal".