Bioxán, con el cáncer infantil

En motivo del Día Mundial del Cáncer infantil, la marca comparte una serie de recomendaciones para el cuidado de la piel de los niños y adolescentes que están en tratamiento oncológico.

14/02/2018

El día 4 de febrero es el Día Mundial del Cáncer y el 15 del mismo mes es el Día Mundial del Cáncer Infantil, una problemática con la que Bioxán colabora desde hace 1 año a través de la Fundación Linceci (Liga Nacional Contra el Cáncer Infantil) donando productos de ...

El día 4 de febrero es el Día Mundial del Cáncer y el 15 del mismo mes es el Día Mundial del Cáncer Infantil, una problemática con la que Bioxán colabora desde hace 1 año a través de la Fundación Linceci (Liga Nacional Contra el Cáncer Infantil) donando productos de su línea NEO a niños sin recursos, ayudando a que su recuperación, durante y post cáncer, sea lo más llevadera posible, gracias al confort que el alto contenido en Vitamina E aporta a la piel alterada o sensibilizada.

El cáncer infantil es la primera causa de muerte en España en niños de 0 a 16 años. De hecho, se diagnostican más de 1.200 casos cada año en nuestro país, por lo que hay unos 20.000 niños aprox. que en su infancia padecen cáncer, lo han padecido o lo padecerán. Los datos son espeluznantes: 1 de cada 500 niños puede tener cáncer; 1de cada 3 niños afectados por cáncer fallece. Afecta no solo al propio niño, sino a todo su entorno familiar y personal, es decir: 20.000 familias. Además, las instituciones han catalogado al cáncer infantil de `baja incidencia´ con respecto a la población total. Es decir, se considera una enfermedad rara y, como tal, no se destinan los fondos suficientes, ni públicos ni privados, para su investigación y avance.

"Los problemas más abundantes que pueden aparecer en la piel de los pacientes oncológicos- apunta Ana Victoria Ugidos, creadora de Bioxán- son xerosis cutánea y prurito cutáneo. La xerosis cutánea es un notable aumento de sequedad de la piel y/o mucosas, que, en ciertos casos, puede ser bastante intensa. Puede producirse tanto por la enfermedad como por el tratamiento. De hecho, la deshidratación provoca pérdida de la eslasticidad de la piel y también descamación de las células, pudiendo provocar hasta heridas y fisuras con cualquier roce. En cuanto al prurito cutáneo es un picor continuo, acompañado de escozor, casi incontrolable y bastante incómodo, que sucede por la xerosis o porque los órganos internos estén afectados". En el rostro, el cáncer también produce alteraciones como pérdida de hidratación y luminosidad. "El cutis adquiere un color cetrino y apagado siendo habitual la sensación de tirantez. También puede descompensarse la zona de los pómulos, provocando el hundimiento de los ojos… Los tratamientos que se emplean para tratar el cáncer provocan otra serie de cambios o problemas dérmicos: aumento de poros, dilatación vascular, hiperpigmentación… De hecho, cada terapia oncológica tiene sus efectos secundarios: por ejemplo, la quimioterapia provoca la aparición de rojeces, manchas, descamación en la palma de las manos y plantas de los pies. La radioterapia genera radiodermatitis, muy habitualmente, que se produce por las agresiones que sufre la piel por el tratamiento. Las células pierden su capacidad de regeneración porque se dañan los vasos sanguíneos que actúan en su renovación y aparecen eritemas, descamaciones e, incluso, se dan casos de úlceras", comenta Ugidos.

Recomendaciones para cuidar la piel de los pacientes oncológicos

Cuidados de la piel en niños:

• Mantener unos niveles óptimos de hidratación diaria en cara, cuerpo y cuero cabelludo.

• Beber mucha agua.

• Evitar las cremas con perfumes o conservantes.

• Si el tratamiento a seguir es de radioterapia, no se deben poner cremas en la zona el mismo día de la radiación, ya que podría disminuir la eficacia del tratamiento.

• La exposición al sol deberá ser la mínima posible.

• Evitar que se rasquen.

• Usar cremas regeneradoras y un factor de protección solar alto, incluso en invierno, aunque solo sea para ir por la ciudad.

• La mejor protección es utilizar ropa de manga larga que evita el contacto directo del sol con la piel, además de una gorra, sombreros...

Cuidados de la piel en adolescentes:

• La piel puede cambiar durante el tratamiento oncológico; si esto sucede, es conveniente adaptar los productos cosméticos a las nuevas características de la misma.

• Es aconsejable ducharse a diario con agua templada y sin frotar, utilizando un gel, preferiblemente sin jabón, lo más suave posible (de pH 5.5 neutro que es el mismo que el de la piel) y secar con una toalla, sin frotar, de uso exclusivo del paciente.

• Para la limpieza facial, se deben utilizar jabones neutros o limpiadores en gel o crema que no den grasa (en caso de utilizar tónico, que sea sin alcohol).

• Se recomienda el uso de desodorantes sin alcohol.

• Lavar las manos frecuentemente y siempre antes de cada comida.

• Se deben mantener unos niveles de hidratación óptimos durante el tratamiento en la piel de cara, cuerpo y en el cuero cabelludo.

• La exposición al sol deberá ser la mínima posible y se recomienda utilizar crema regeneradora y un factor total de protección solar, incluso si es invierno y vamos por la ciudad (es recomendable reponer la protección solar cada dos horas para que no pierda eficacia).

• No tocarse granos ni espinillas ya que podemos producir heridas y cicatrizan con más dificultad.

• En caso de tener un brote de acné, dejar de utilizar los productos antiacné o abrasivos con la piel (peelings, limpiezas de cutis, jabones secantes, etc.) o aquellos que contengan grasas excesivas (aceites o cera).

• Depilarse con cera fría antes de comenzar el tratamiento. Es desaconsejable la depilación con cuchilla, ya que durante el tratamiento es más difícil que los posibles cortes o heridas cicatricen correctamente.

• Durante el tratamiento no es aconsejable realizar depilaciones.

• En el caso de los chicos, si ya están en edad de afeitarse, se debe hacer las menos veces posible extremando las precauciones para no producirse cortes.

• No hacerse piercings ni tatuajes antes de comenzar el tratamiento ni durante el mismo en ninguna parte del cuerpo.

• Para el cuidado de los labios es recomendable el uso de bálsamos hidratantes y regenerantes con protección solar y evitar el uso de productos que contengan alcanfor, eucalipto o alcohol.

• No se deben hacer exfoliaciones en la piel de los labios para no provocar heridas.

 

Autor: IM Farmacias
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