Leopoldo Ruíz nos recibe en su farmacia del barrio de Chamberí. Su botica en pleno centro de Madrid está preparada para los tiempos que corren. "En el mundo digital o te renuevas o te quedas atrás. El ritmo de vida, las exigencias del mercado, los continuos avances y novedades nos ...
Leopoldo Ruíz nos recibe en su farmacia del barrio de Chamberí. Su botica en pleno centro de Madrid está preparada para los tiempos que corren. "En el mundo digital o te renuevas o te quedas atrás. El ritmo de vida, las exigencias del mercado, los continuos avances y novedades nos obligan a que intentemos crear alianzas entre los propios farmacéuticos para fortalecer nuestra posición".
Y esto pasa por potenciar la atención profesional sanitaria, y subrayar la labor social que realiza el farmacéutico. "No nos podemos convertir en capta-clientes a toda costa. Por el contrario, debemos respetar las reglas del mercado, sobre todo en lo que se refiere a la política de precios".
Con una clientela más o menos fija, la emblemática Farmacia Berlinesa atiende a un vecindario cada vez más rejuvenecido. "La tendencia en los últimos años se dirige hacia los servicios complementarios; de hecho, el poder adquisitivo medio-alto de nuestros pacientes posibilita que más del 50% de las ventas correspondan a venta libre".
Para este experimentado boticario el enfoque de gestión económica es imprescindible para el futuro de la farmacia. "Hoy en día, los programas de gestión de nuestras farmacias ofrecen herramientas de análisis muy eficaces. Esto nos permite poder implantar planes de ventas, como crecimientos por categorías, planes de marketing, planes de compras, gestión del stock, etc., que son fundamentales a la hora de tomar de decisiones sobre el negocio". De ahí que considere necesaria la formación en estas materias.
Exigente con el futuro, Leopoldo se muestra positivo respecto a la situación actual. "La situación de la farmacia ha mejorado con respecto a los últimos años, sin embargo, es necesario hacer un ejercicio de modernización en diferentes aspectos. La profesionalización de los servicios y la concentración de farmacias deben ser temas prioritarios", asegura, al tiempo que añade otros factores esenciales como son los objetivos por ventas, los planes de marketing y la colaboración con los proveedores, todo lo cual contribuye a mejorar los resultados económicos.
En cuanto a la bajada de precios como medida para atraer al cliente, Leopoldo opina: "En cualquier negocio bajar los precios es un suicidio. Nosotros tenemos un valor que debemos explotar al máximo que es nuestra formación y atención al paciente. Dicha estrategia, además, deteriora gravemente la cuenta de resultados", advierte, y concluye: "Mis años de trabajo en una multinacional me han servido para aprender que hay que planificar bien todos los parámetros económicos, desde el plan de ventas hasta los objetivos de rentabilidad".
Por tanto, las claves del futuro están en elaborar una buena planificación de ventas y de compras buscando objetivos de rentabilidad realistas que permitan la sostenibilidad de las farmacias. "Esto requiere un esfuerzo importante porque se trata de un trabajo extra, pero resulta imprescindible si queremos seguir avanzando". Junto a ello, la otra cuestión esencial será la implantación de los servicios profesionales farmacéuticos, "que deben estar remunerados por dos vías: una, por el propio paciente a través de una cantidad simbólica, y otra, mediante financiación pública".
