Con el patrocinio de Pranarôm, se analizó en Infarma 2019 el tema de la pediatría y las aplicaciones clínicas de la fitoterapia a través de los aceites esenciales, siendo moderador Josep Allué, vocal de Plantas Medicinales y Homeopatía del COF de Barcelona. Alfredo Quevedo, responsable científico de Pranarôm , recordó que ...
Con el patrocinio de Pranarôm, se analizó en Infarma 2019 el tema de la pediatría y las aplicaciones clínicas de la fitoterapia a través de los aceites esenciales, siendo moderador Josep Allué, vocal de Plantas Medicinales y Homeopatía del COF de Barcelona.
Alfredo Quevedo, responsable científico de Pranarôm , recordó que siempre nos han enseñado en la carrera que no se pueden usar los aceites esenciales en niños. Realmente, consideró que hay que saber recomendarlos. El problema es que se han utilizado productos que no son aceites esenciales y que se ha confundido todo. No es lo mismo un aceite esencial, palabra protegida por la farmacopea europea, que una esencia. Se pueden emplear los aceites esenciales en niños, pero hay que explicar al paciente cómo hacerlo con un consejo farmacéutico. Hay que informar hoy día sobre la calidad. "Actualmente, hacemos más caso a un bloguero que a un farmacéutico", lamentó. Su consejo para dispensar fitoterapia es informarse, informarse de nuevo, informar y exigir calidad. "En fitoterapia, la calidad no está asegurada por desgracia como debería", reconoció. Un criterio de calidad es que estén los aceites esenciales quimiotipados. Pranaróm es pionero en este concepto. El problema es que no está reconocido por la farmacopea europea. Quimiotipado significa que se indica la molécula principal y se facilitan los análisis completos.
La fitoterapia puede servir en pediatría como tratamiento para síntomas menores o como coadyuvante de un tratamiento convencional. Está el aceite esencial unitario, que requiere mucha formación, o una línea de productos terminados, que es lo que Pranarôm ha denominado Gama PranaBB. Su botiquín básico incluye Ravintsara, Árbol del Té (auténtica estrella en el mundo de los aceites esenciales), Mandarina, Manzanilla Romana y Espliego Macho. La estrella de producto acabado de Pranarôm es el Bálsamo Pectoral, que elimina la mucosidad, suaviza las vías respiratorias, es antiviral e inmunoestimulante y calma al bebé. Al recomendar algo como esto, "el niño se va a curar antes" y se estimularán las defensas. Otras opciones que citó fueron el Gel Accesos Dentales, el Spray de Masaje-Confort Digestivo o el Gel-Moratones-Chichones (que se puede aplicar incluso con heridas abiertas), entre otras.
Quevedo advirtió de que, cuando un aceite esencial está de moda, hay que tener cuidado, porque puede perder calidad. "Hay que exigir calidad, sobre todo con un niño pequeño", dijo. Tiene que ser aceite esencial para que realmente sea natural. Insistió en la necesidad de que estén quimiotipados.
