La historia de Juan de Dios Cruz es única y singular, la escuchamos con detenimiento. "Mi vocación por la salud viene desde que era pequeño, pero lo que realmente me hizo declinarme por la farmacia fue presenciar el amor y la entrega de mi padre hacia esta profesión que ha ...
La historia de Juan de Dios Cruz es única y singular, la escuchamos con detenimiento. "Mi vocación por la salud viene desde que era pequeño, pero lo que realmente me hizo declinarme por la farmacia fue presenciar el amor y la entrega de mi padre hacia esta profesión que ha defendido durante muchos años como presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Córdoba, y en su última etapa, como vicepresidente del Consejo General de Farmacéuticos de España".
Toda una vida dedicada a la antigua botica que Juan de Dios supo recoger como legado y dotarle de continuidad. "Mi comienzo en la profesión es bastante reciente, pues tan solo han pasado 4 años desde que terminé la carrera de farmacia, óptica y nutrición. Mi experiencia, por tanto, es escasa pero intensa, ya que llevo 3 años como titular de oficina de farmacia en una zona rural y maravillosa de Córdoba que es Santa María de Trassierra".
Un municipio ubicado en plena Sierra Morena de apenas 700 habitantes. "Aquí el trato con la gente es espectacular, la cercanía que se vive en el ámbito rural creo que es inigualable y esto permite un desarrollo maravilloso de la profesión". Pero ¿qué es lo fundamental en cualquier tipo de farmacia sea urbana o rural? "Sin duda la atención farmacéutica, es decir, todas las acciones que ponemos en marcha como farmacéuticos giran en torno al paciente".
Lo cual requiere formación, dedicación y mucho esfuerzo. "Por esto mismo he continuado mi formación cursando un master de atención farmacéutica, y actualmente he comenzado mis estudios de doctorado sobre este tema. Mi objetivo es comenzar a introducir estos servicios de una forma profesional, regulada y remunerada".
Preparación y especialización para adaptarse a los nuevos tiempos. "Está claro que todo debe de evolucionar, pero nunca esta evolución puede llevar a perjudicar al paciente. Por desgracia, en los últimos años hemos sido perjudicados por decisiones políticas basadas en el ahorro económico. Creo que el modelo farmacéutico español es uno de los mejores del mundo, y está en nuestras manos que siga siendo así".
Claro está, esto requiere colaboración entre las instituciones implicadas. "Muchas decisiones políticas que tenían por objetivo ahorrar se han vuelto en contra suponiendo un mayor gasto del establecido previamente", admite Juan de Dios, y continúa: "Si los gobiernos trabajasen de forma aún más estrecha con los colegios profesionales podrían surgir medidas mucho más elaboradas y con resultados positivos para el paciente".
La farmacia del futuro es sin duda asistencial. Servicios como la dermo o la nutrición están en alza, "pero no por ello debemos de olvidar que el medicamento es el verdadero sustento del modelo farmacéutico". Y en cuanto a otros servicios como el seguimiento farmacoterapéutico o sistemas personalizados de dosificación "deben de estar regulados, remunerados y abordados de manera multidisciplinar".
En este camino la formación es fundamental. "El COF de Córdoba -del que formo parte como vocal de farmacia rural y atención farmacéutica- apuesta decididamente por la formación continuada porque queremos que los pacientes estén en manos de profesionales que no se quedan atrás y que ofrecen una atención basada en la excelencia. Eso es lo que verdaderamente da sentido a nuestra existencia".
