El paciente es el centro de la Farmacia, su razón de ser. De hecho, es precisamente el contacto directo con él lo que hace a muchos farmacéuticos decantarse por esta profesión tan vocacional. Eso mismo le pasó a la burgalesa Mª José Losa, una de las protagonistas del A pie ...
El paciente es el centro de la Farmacia, su razón de ser. De hecho, es precisamente el contacto directo con él lo que hace a muchos farmacéuticos decantarse por esta profesión tan vocacional. Eso mismo le pasó a la burgalesa Mª José Losa, una de las protagonistas del A pie de calle de nuestro número de septiembre, para quien "los pacientes son en su mayoría personas mayores y fieles con las que mantenemos una estrecha relación y confían en nuestro criterio".
Una relación que se ha intensificado durante la pandemia originada por el coronavirus: "estos meses los farmacéuticos hemos demostrado nuestra profesionalidad, y la sociedad así nos lo ha reconocido". Para Losa, "hemos recuperado nuestra esencia, que es el servicio a los pacientes, y en este sentido debemos seguir trabajando para implementar los servicios que ofrecemos a la sociedad". Y añade: "los pacientes ya no poseen acceso libre a la atención primaria, y hoy ya somos su primera opción, la referencia más cercana y más accesible para solucionar dudas y consultas sobre su salud, su enfermedad, su medicación".
Objetivo: ayudar
Precisamente en esta línea, y con el objetivo de seguir desarrollando su rol asistencial de la mejor manera posible, durante el inicio de la pandemia el 58% de las farmacias participantes en el Observatorio Covid-19, realizado por IM Farmacias y la consultora Shoppertec entre los días 28 y 31 de marzo, pusieron en marcha alguna iniciativa con el fin de atender a las personas infectadas, con movilidad reducida o a los más vulnerables (p. ej. mayores de 65 años). En este sentido, el 75% de ellas implantaron el servicio de reparto domiciliario, el 65% el pedido telefónico, el 40% el pedido por WhatsApp (hay que recordar que muchas de ellas ya contaban con esta opción) y el 13% la venta online. Apoyar al vecindario, desarrollar acciones de voluntariado o participar en actividades impulsadas a través de los COFs o de las cooperativas fueron otras de las acciones que impulsaron según el 14% de las farmacias encuestadas.
Pero, ¿qué acogida tuvieron todas estas iniciativas? Lo preguntamos en el marco de la Segunda Ola del Observatorio Covid-19, llevada a cabo entre los días 8 y 18 de mayo. Así, el el 76% de las farmacias encuestadas declararon que el reparto a domicilio ganó relevancia durante esos días, así como los pedidos telefónicos (72%) y por WhatsApp (65%). Asimismo, el 40% de ellas vieron aumentada la venta online y el 21,5% detectaron mayor uso de la tarjeta de fidelidad.
Confianza, veracidad y atención de calidad
Ciertamente, la crisis sanitaria ha reforzado y ha puesto en valor (más si cabe) el papel de la Farmacia española. Así lo revelan los resultados del estudio Papel de la Farmacia en la crisis del Covid-19, realizado por GAD3 entre el 4 y el 16 de abril a una muestra de más 3.400 personas. Impulsado por el Consejo General de Farmacéuticos, recoge la valoración de la sociedad española de la respuesta que ha tenido la Farmacia ante el Covid-19, desde la labor divulgativa y de educación sanitaria hasta iniciativas asistenciales como la entrega de medicamentos a domicilio o la dispensación en farmacias de medicamentos hospitalarios. A grandes rasgos, cabe destacar que el 9% de los consultados acudió a que su farmacéutico habitual le informara acerca del virus, proporción que representa a más de 3,5 millones de personas. El porcentaje disminuyó al 6,6% en el caso de ir a centros de Salud.
Asimismo, según el estudio, más del 90% de los españoles reconocen la profesionalidad y el servicio público prestado por las farmacias durante la crisis del coronavirus. La confianza de la población española hacia los farmacéuticos es prácticamente unánime (98%), junto con la veracidad de la información facilitada y la calidad en la atención recibida (94%). Además, el 60% de los españoles consideran que ha mejorado su imagen y percepción de los farmacéuticos a raíz de la labor desempeñada a lo largo de la crisis sanitaria. La imagen de los farmacéuticos se ha visto reforzada de manera homogénea en toda la población, es decir, tanto en jóvenes como en mayores, en zonas rurales y en las grandes urbes.
Pero hay más: entre marzo y abril, casi 30 millones de españoles acudieron a las farmacias. La inmensa mayoría fue para seguir tratándose de las dolencias habituales o crónicas. La farmacia en ningún momento dejó de abastecer y supo adaptarse. Más de dos millones de españoles recibieron atención telefónica de su farmacia. Y 830.000 españoles, sobre todo mayores de 65 años, recibieron su fármaco en el domicilio. Se lo llevó su farmacéutico. El 91,3% de los españoles reconoce el servicio público prestado por las farmacias en la pandemia. Eso hace que la imagen de la farmacia española, que ya era buena, mejore. Dos de cada tres consideran que los farmacéuticos no recibieron por parte de las autoridades el material de protección adecuado.
A la atención recibida en farmacia se le puso una nota de un 8,3 frente al 6,6 con el que se puntuó al Sistema Sanitario. Igualmente, las medidas excepcionales como la dispensación domiciliaria o la de medicamentos de dispensación hospitalaria en Oficina de Farmacia fueron valoradas muy positivamente por los ciudadanos.
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