Los profesionales farmacéuticos españoles llevan meses demandando el poder sumarse a la lucha contra el covid-19. Primero solicitaron poder realizar tests de cribado y participar en la vacunación de la gripe, para evitar en la medida de lo posible el colapso en hospitales de centros de salud. Ahora, ante ...
Los profesionales farmacéuticos españoles llevan meses demandando el poder sumarse a la lucha contra el covid-19. Primero solicitaron poder realizar tests de cribado y participar en la vacunación de la gripe, para evitar en la medida de lo posible el colapso en hospitales de centros de salud. Ahora, ante las dificultades para llevar a la práctica la estrategia de vacunación nacional contra el coronavirus en algunas comunidades, piden participar también en esa labor, convirtiendo los establecimientos en puntos de inmunización.
Eso sí, pese a que los requerimientos de los farmacéuticos en este asunto se han intensificado en las últimas semanas por la llegada masiva de los lotes de dosis de Pfizer, Moderna y Astrazeneca, de momento el Gobierno no parece estar por la labor.
Mirando hacia otros países europeos, sin embargo, el escenario es bien distinto, pues algunos ya han sumado a las farmacias en una lucha directa contra la pandemia, incluyéndolas en los planes de vacunación.
Reino Unido
A mediados de enero, Reino Unido abría la veda en las farmacias europeas y comenzaba a administrar la vacuna covid-19 en las boticas, con el ambicioso objetivo de acelerar al máximo posible la inmunización y programarla 24 horas, 7 días a la semana.
Doscientas farmacias comunitarias se unieron primero a hospitales y siete centros a gran escala en la administración del suero, y poco a poco se han ido agregando miles de establecimientos de la red de farmacias del país. Con mucho éxito, cabe destacar: alrededor 30 millones de personas (más de la mitad de la población adulta) ya han recibido al menos la primera dosis.
Francia
Las boticas francesas ya tenían la potestad para vacunar frente a la gripe desde 2020, y en enero las autoridades sanitarias del país confirmaran que este permiso se extendería a las vacunas covid-19 tras las primeras fases, como parte de un plan de aceleración de la inmunización. A finales de febrero comenzaron a distribuirse en las farmacias.
Irlanda
El de Irlanda es un caso parecido al francés, es decir, ya tenían experiencia en otros procesos de vacunación, así que era de esperar que las farmacias del país estuvieran presentes en el `Programa Nacional de Vacunación frente a la COVID-19´, al que se irán incorporando en abril, cuando se disponga de un mayor número de dosis destinadas a la población general. Se considera que, durante las fases iniciales, las estructuras públicas son suficientes para vacunar a los colectivos prioritarios, de manera que por el momento, su papel se limitará a inocular el medicamento de Astrazeneca.
Italia
Este lunes el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, daba luz verde para que las farmacias italianas comenzaran a vacunar, tras la firma de un protocolo con las regiones y las federaciones de este sector para que los profesionales "oportunamente formados" se unan a la campaña de vacunación nacional. En concreto, los farmacéuticos que quieran adherirse al plan tienen que realizar un curso de dos semanas de acabado por el Instituto Superior de Sanidad.
"La campaña de vacunación es la verdadera clave para cerrar una etapa tan difícil. Hoy damos otro paso adelante importante para hacerla más rápida", ha argumentado Speranza.
