Tomás Bueno comenzó su carrera farmacéutica como docente en la Universidad de Granada y fue director técnicofarmacéutico de un laboratorio dedicado a la producción de complementos alimenticios, Verbionat. Tras unos años volcado en la investigación y en la industria, decidió ejercer como farmacéutico comunitario. Los años pasan rápido y ya ...
Tomás Bueno comenzó su carrera farmacéutica como docente en la Universidad de Granada y fue director técnicofarmacéutico de un laboratorio dedicado a la producción de complementos alimenticios, Verbionat. Tras unos años volcado en la investigación y en la industria, decidió ejercer como farmacéutico comunitario. Los años pasan rápido y ya lleva 20 años detrás del mostrador: "Lo más satisfactorio es el trato con los pacientes porque son muy agradecidos, y el retorno es inmediato".
Orgulloso de su profesión, Tomás se siente dichoso de la labor que realiza a diario: "Somos muy afortunados de poder cambiar la vida de las personas con nuestro trabajo. Creo, además, que aportamos muchísimo en la prevención cuando por ejemplo colaboramos en determinados programas de salud pública". Es el caso de las campañas como el cribado de asintomáticos mediante la realización de test de antígenos en o cina de farmacia.
Y es que la cualificación representa un valor diferencial de los farmacéuticos respecto a otros canales. "Lo que nos distingue es precisamente la excelente formación de los equipos de trabajo, así como la cercanía al paciente y la gran capilaridad de las o cinas de farmacia". Sin duda, se trata de una de las fortalezas de la profesión: el trato cercano y la personalización de la atención.
Entre las últimas tendencias del mercado "muchos pacientes nos demandan consejo en dermofarmacia, homeopatía, fitoterapia y ortopedia". Junto a ello están al alza los complementarios alimenticios, la cosmética y los servicios profesionales, que deben ser remunerados porque "ahorran recursos a la administración, por lo que es lógico y razonable que se cobren".
Con una población principalmente envejecida y polimedicada, la farmacia ha vuelto a demostrar por qué es el primer eslabón del sistema: "Durante la pandemia hemos sido un rompeolas llegando donde no llegaba nadie; todo ello con un gran coste personal. Además, hemos aprendido a colaborar de forma más estrecha con el resto de componentes del equipo de salud, sobre todo, lo que se re ere a Atención Primaria y hospital".
Una farmacia que está en continua transformación para adaptarse a las necesidades que demanda el ciudadano. "La evolución ha sido en algunos aspectos a mejor y en otros a peor (Real Decreto 5/2000 y siguientes). Pero entiendo que las decisiones se han tomado para potenciar el per l sanitario y asistencial".
Un modelo cada vez más asistencial, dinámico y volcado en el paciente: "Los farmacéuticos estamos en un momento de cambio de paradigma", asegura Tomás, y añade: "Hay que pivotar hacia servicios asistenciales profesionales y remunerados, es decir, aquellos que potencian nuestro perfil sanitario".
Finaliza la entrevista con un mensaje esperanzador: "Estamos viviendo un momento muy ilusionante, y hay que mirar al futuro con optimismo y energía para afrontar los nuevos retos"
