Piedad García (Burgos) Piedad atesora una extensa trayectoria profesional. Con más de 20 años detrás del mostrador de su oficina de farmacia, conoce bien de cerca qué es ser farmacéutica. Licenciada en Ciencias Químicas y posteriormente en Farmacia, actualmente es secretaria del COF de Burgos y miembro de la red ...
Piedad García (Burgos)
Piedad atesora una extensa trayectoria profesional. Con más de 20 años detrás del mostrador de su oficina de farmacia, conoce bien de cerca qué es ser farmacéutica. Licenciada en Ciencias Químicas y posteriormente en Farmacia, actualmente es secretaria del COF de Burgos y miembro de la red de farmacias centinela de Castilla y León. "Fue mi padre quien me animó a realizarme en el mundo de la oficina de farmacia, donde podría aunar el componente científico y sanitario con el empresarial". Su máxima es la profesionalidad y la atención personalizada: "Somos una farmacia de barrio con pacientes muy recurrentes y delizados. Trabajamos con fichas que nos permiten identificar todas sus dispensaciones, lo que nos permite llevar a cabo un seguimiento de sus tratamientos y verificar la adherencia a los mismos".
La farmacia ha sufrido un antes y un después a raíz de la pandemia. "Hemos vivido momentos críticos en los que hemos sabido adaptarnos", enfatiza, y añade: "Ha quedado de manifiesto que nuestra profesión es esencial, indispensable y enormemente comprometida con la sociedad". Por tanto, los farmacéuticos han demostrado su capacidad de adaptación, que ha tenido su recompensa: "Hemos experimentado situaciones complicadas de gran incertidumbre. La mayor gratificación es el reconocimiento del paciente y la unión de los compañeros".
Y es que el modelo de farmacia evoluciona a la par que la sociedad: "Entre sus ventajas destaca la situación estratégica a lo largo de todo el país, la distribución propia y los colegios provinciales, autonómicos y el consejo general, que nos permiten estar centrados en el paciente en nuestro día a día"
Lo cual ha quedado patente durante el Covid-19. "Nuestra fortaleza es la unión profesional", incide Piedad con contundencia, y concluye: "Somos más de 22.000 oficinas de farmacia que trabajamos con un mismo criterio, lo cual nos hace fuertes y profesionales. Sólo así seremos imprescindibles en el futuro".
En concreto, en Castilla y León, uno de los mayores avances es la recertificación profesional dirigida por el consejo, que "dará mayor homogeneidad a la continua formación que desde siempre venimos realizando". Otro es el encargo de la Consejería de Sanidad del estudio de seguridad y eficacia de las vacunas frente al SARS-COV-2
Una farmacia reforzada y volcada por y para la sociedad, esa es la farmacia del futuro. "La ciudadanía confía en nosotros. Prueba de ello es que cada vez se firman más convenios con asociaciones de pacientes, lo cual evidencia la transversalidad e integración de la farmacia en el tejido social". Un ejemplo es el penúltimo estudio realizado por la red de farmacias centinela de Castilla y León sobre la seguridad de los nuevos antidiabéticos orales por encargo de la asociación de diabéticos.
La clave para los próximos años es afianzar el modelo de farmacia asistencial con la incorporación de los servicios complementarios como los SPD´s, la deshabituación tabáquica o la detección precoz de VIH, y la promoción de la salud con campañas sanitarias y sociales: "Animo a las nuevas generaciones a enfocar su carrera laboral en este sentido y a huir de los perfies comerciales. Hay que centrarse en lo que realmente fortalece y consolida nuestra profesión, que es lo que hará que perdure en el tiempo".
