Una oleada de la ´viruela del simio´ o ´monkeypox´, una enfermedad zoonótica viral se extiende por el mundo y la Organización Mundial de la Salud ha hecho sonar la alarma para que se rastreen todos los casos que puedan ser detectados. De momento, los países más afectados son Reino Unido, ...
Una oleada de la ´viruela del simio´ o ´monkeypox´, una enfermedad zoonótica viral se extiende por el mundo y la Organización Mundial de la Salud ha hecho sonar la alarma para que se rastreen todos los casos que puedan ser detectados. De momento, los países más afectados son Reino Unido, con 9 casos declarados. Le siguen España con 7 casos y otros 24 considerados sospechosos, mientras Portugal ha registrado, hasta el momento, 5 y otros 20 se están estudiando. Otros países como EEUU han declarado un caso, en concreto en el Estado de Massachusetts. Canadá ha sido el último país en informar que estaba investigando más de una docena de casos sospechosos.
La viruela del mono se descubrió por primera vez en 1958 cuando se produjeron brotes de una enfermedad similar a la viruela en monos mantenidos para investigación. El primer caso humano se registró en 1970 en la República Democrática del Congo ( RDC ), y desde entonces se ha informado de la infección en varios países de África central y occidental. La mayoría de los casos se notifican en la República Democrática del Congo y Nigeria. Fuera del continente africano la viruela del simio en humanos solo se identificó tres veces: en 2003 en EE.UU. y en 2018 en el Reino Unido e Israel.
Transmisión de la patología
Los expertos sospechan que el patógeno causante de la patología circula en los roedores, y los monos son considerados falsos huéspedes. Las infecciones podrían transmitirse a través del contacto con las secreciones de animales infectados (se cree que los roedores son el principal reservorio animal para la transmisión a los humanos), humanos o materiales contaminados con el virus. El virus ingresa al cuerpo a través de la piel rota (aunque no sea visible), el tracto respiratorio o las membranas mucosas (ojos, nariz o boca).
La propagación de persona a persona es poco común, pero puede ocurrir a través del contacto con ropa (como ropa de cama o toallas) usada por una persona infectada; contacto directo con lesiones o costras de la piel de la viruela del simio; y tos o estornudos de una persona con sarpullido de viruela del simio
Recomendaciones de la OMS
La Organización Mundial de la Salud, en su último comunicado, difundía una serie de pautas a tener en cuenta, subrayando la importancia de las medidas intensivas de salud pública además del rastreo continuo de contactos. "Cualquier paciente con sospecha de viruela del simio debe ser investigado y aislado con atención de apoyo durante los períodos infecciosos supuestos y conocidos, es decir, durante las etapas prodrómica y exantemática de la enfermedad, respectivamente".
El rastreo oportuno de contactos, las medidas de vigilancia y la sensibilización entre los responsables de la atención médica, incluidas las clínicas de salud sexual y dermatología, son esenciales para prevenir más casos secundarios y el manejo efectivo del brote actual, según la Agencia de Salud.
Respecto a los profesionales sanitarios y otros cuidadores que atienden a pacientes con viruela símica sospechada o confirmada deben implementar precauciones de control estándar, de contacto y de microgotas. Las muestras tomadas de personas con sospecha de viruela del simio o animales con sospecha de infección por el virus de la viruela del simio deben ser manipuladas de manera segura por personal capacitado que trabaje en laboratorios debidamente equipados.
Asimismo, recuerda que cualquier enfermedad durante el viaje o al regresar de un área endémica debe informarse a un profesional de la salud, incluida la información sobre todos los viajes recientes y el historial de vacunación.
Insiste dicha Organización en que los residentes y viajeros a países endémicos deben evitar el contacto con animales enfermos (vivos o muertos) que puedan albergar el virus de la viruela del simio (roedores, marsupiales, primates) y deben abstenerse de comer o manipular animales de caza (carne de animales silvestres). "Se debe enfatizar la importancia de la higiene de las manos mediante el uso de agua y jabón o desinfectante a base de alcohol", añade, al tiempo que recuerda que desde la Organización se continúa monitoreando de cerca y que la situación evoluciona rápidamente.
