El SARS-CoV-2 podría sobrevivir durante un mes en productos cárnicos refrigerados o congelados

Se hacen necesarios los esfuerzos continuos para prevenir la contaminación de los alimentos y las superficies y utensilios de procesamiento de estos, así como las manos de los trabajadores.

Estado: Esperando

12/07/2022

Subvariantes del SARS-CoV-2 podrían sobrevivir con productos cárnicos en el refrigerador o el congelador, hasta por 30 días, según hallazgos se publican en ´Applied and Environmental Microbiology´, publicación oficial de la Sociedad Estadounidense de Microbiología. Los investigadores iniciaron esta investigación después de conocer que los brotes de COVID-19 estaban ocurriendo en ...

Subvariantes del SARS-CoV-2 podrían sobrevivir con productos cárnicos en el refrigerador o el congelador, hasta por 30 días, según hallazgos se publican en ´Applied and Environmental Microbiology´, publicación oficial de la Sociedad Estadounidense de Microbiología.

Los investigadores iniciaron esta investigación después de conocer que los brotes de COVID-19 estaban ocurriendo en el sudeste asiático sin transmisión comunitaria previa. Los informes de esas comunidades "sugirieron que los productos cárnicos empacados, producidos en áreas donde circulaba el SARS-CoV-2, podrían haber sido la fuente del virus", explicó la primera autora Emily S. Bailey. "Nuestro objetivo era investigar si virus similares podrían o no sobrevivir en este entorno. La investigación es importante porque el SARS-CoV-2 puede replicarse dentro del intestino, así como en el tracto respiratorio", añadió.

La investigación se realizó utilizando pollo, res, cerdo y salmón, y virus sustitutos con picos similares a los del SARS-CoV-2, como sustitutos, explicó Los investigadores almacenaron los productos tanto a temperatura de refrigeración (4 o C o 39,2 o F) como de congelación (-20 o C o -4 o F).

"Aunque es posible que no se almacene carne en el refrigerador durante 30 días, sí se puede almacenarla en el congelador durante ese tiempo. Incluso descubrimos que los virus podían cultivarse después de estar congelados durante ese tiempo", apuntó Bailey.

En el estudio, los investigadores utilizaron 1 virus de ARN con envoltura lipídica y 2 coronavirus animales, el virus de la hepatitis murina y el virus de la gastroenteritis transmisible como sustitutos.
Los tres virus se emplearon previamente como sustitutos del SARS-CoV-2, generalmente con mayores reducciones en sus números observados en refrigeración que en temperaturas de congelación. La reducción en números también varió según el alimento utilizado.

"Se necesitan esfuerzos continuos para prevenir la contaminación de los alimentos y las superficies de procesamiento de alimentos, las manos de los trabajadores y los utensilios de procesamiento de alimentos, como los cuchillos. Además, se debe abordar la falta de desinfección o la desinfección inadecuada de estos alimentos antes del envasado", concluyeron los autores.

Autor: IM Farmacias