Como si piojos y liendres hubieran estado esperando su revancha, por parón de la pandemia de Covid-19, la primera mitad de 2022 ha sido tiempo de lucha contra estos parásitos. Por esta razón, ahí ha estado siempre el farmacéutico como garante de asesoramiento y elección del mejor producto en cada ...
Como si piojos y liendres hubieran estado esperando su revancha, por parón de la pandemia de Covid-19, la primera mitad de 2022 ha sido tiempo de lucha contra estos parásitos. Por esta razón, ahí ha estado siempre el farmacéutico como garante de asesoramiento y elección del mejor producto en cada caso. Con el consejo presto para recomendar revisiones periódicas del cabello e indicación de tratamiento cuando aparece el picor en el cuero cabelludo.
Biología indeseable
Pediculus humanus capitis es el piojo humano de la cabeza. Se trata de un insecto parasitario que puede instalarse también en las cejas y las pestañas, además de en la cabeza. Para nutrirse varias veces al día de la sangre del paciente se ubica cerca del cuero cabelludo. Se alimenta cada 4-6 horas y no puede vivir más de uno o dos días fuera de la cabeza. Este tipo de piojo carece de alas para volar y patas saltadoras, por lo que se desliza, generalmente con rapidez, de una cabeza a otra cuando entran en contacto, como suele ocurrir con los juegos infantiles, o cuando se comparten objetos personales como toallas, sombreros, peines, cepillos o auriculares.
El ciclo vital del piojo de la cabeza se divide en tres etapas. La primera es la de liendre, huevo que eclosionan a los 6-9 días de haber sido depositado. Entonces surge la ninfa, que es la forma inmadura del piojo y alcanza su tamaño adulto a los 9-12 días. El piojo adulto tiene una esperanza de vida de 3 a 4 semanas, aunque no puede sobrevivir fuera de la cabeza más allá de 48 horas.
La liendre no puede eclosionar y suele morir a la semana si la temperatura ambiente es inferior a la del cuero cabelludo humano. Tras la eclosión, la ninfa precisa nutrirse a los pocos minutos y la hembra de piojo adulto pone una media de ocho huevos al día.
La frecuencia de pediculitis es más común a temperaturas ambientales elevadas, en coincidencia con los meses de verano, aunque también surgen brotes en ambientes cerrados y cálidos, como las aulas escolares en los meses frescos del otoño y el invierno. Razón por la que los docentes deben estar siempre vigilantes ante aquellos niños que se rascan el pelo compulsivamente.
La predilección de los piojos por las cabezas de los niños se debe a que su PH suele ser más alcalino que el de los adultos, aunque esto no les libra del riesgo de infestación.
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