Reactiva la luminosidad de tu rostro
Descubre el poder de los aceites esenciales para un rostro joven y radiante.
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Un rostro luminoso es aquel que respira, está lleno de salud y vitalidad, y por ello luce radiante. Para disfrutar de una piel luminosa, fresca y llena de vitalidad es cuestión de buenos hábitos de cuidado. Seguir una rutina facial de doble limpieza e hidratación profunda es imprescindible para evitar ...
Un rostro luminoso es aquel que respira, está lleno de salud y vitalidad, y por ello luce radiante. Para disfrutar de una piel luminosa, fresca y llena de vitalidad es cuestión de buenos hábitos de cuidado. Seguir una rutina facial de doble limpieza e hidratación profunda es imprescindible para evitar una tez apagada y sin luz, pero hay acciones específicas que potencian aún más la belleza natural de nuestro rostro.
Entre ellas destaca la exfoliación facial. Exfoliar nuestra piel una vez a la semana permite afinar el rostro, darle brillo y elasticidad. Que junto con un ritual de belleza basado en aceites esenciales e ingredientes activos con propiedades regeneradoras e iluminantes despertará la luminosidad natural de nuestro rostro.
Desde Darphin confían en el poder de los aceites esenciales como increíbles elixires que potencian la luminosidad y vitalidad de nuestro rostro. Cuentan con multitud de ingredientes naturales, extractos botánicos y flores que se reúnen en el icónico Aceite Esencial de Nectar de 8 flores y Oro para una piel radiante con cada aplicación.
Aceite Esencial de Nectar de 8 flores y Oro
Una combinación maestra de 8 flores preciosas y más de 20 extractos botánicos y esenciales en una fórmula ligera y de rápida absorción, con oro de 24K para una piel radiante y juvenil.
- Una combinación de 8 Flores (Siempreviva, Ylang Ylang, Pachulí, Neroli, Rosa, Lavanda, Jazmín y Lirio) con infusión de Ácido Salicílico, que ayuda a regenerar las células de la superficie de la piel y proporciona una piel radiante de juventud, nutrida y saludable.
- Aceite de Espino Amarillo, rico en Omegas 3 y 6, lípidos esenciales que el organismo no produce de forma natural y que aceleran el proceso de nutrición de la piel.
