Investigadores del Centro de Investigación Mater Research (Australia) han descubierto un vínculo genético previamente desconocido entre las plaquetas de la sangre y trastornos cerebrales. En concreto, el estudio identificó un amplio panorama de superposición genética entre las dimensiones de células sanguíneas y hasta 11 trastornos neurológicos y psiquiátricos, incluida la ...
Investigadores del Centro de Investigación Mater Research (Australia) han descubierto un vínculo genético previamente desconocido entre las plaquetas de la sangre y trastornos cerebrales. En concreto, el estudio identificó un amplio panorama de superposición genética entre las dimensiones de células sanguíneas y hasta 11 trastornos neurológicos y psiquiátricos, incluida la enfermedad de Parkinson.
El estudio, dirigido por el profesor asociado Jake Gratten y el Dr. Yuanhao Yang, de la Universidad de Queensland (Australia), analizó datos de estudios genéticos a gran escala para mejorar la comprensión de las relaciones de causa y efecto entre las mediciones de sangre y los trastornos neurológicos y psiquiátricos comunes.
La investigación, cuyos resultados han sido publicados en ´Cell Genomics´ surgió a partir de informes de asociaciones entre una variedad de diferentes medidas de sangre y el riesgo de accidente cerebrovascular, esclerosis múltiple y depresión. "Estos resultados despertaron interés en el desarrollo de biomarcadores basados en sangre para trastornos cerebrales comunes, pero no estaba claro si había una base genética para estas relaciones", expuso el Dr. Yang, principal autor.
Riesgo de enfermedad de Parkinson
Para estos investigadores un hallazgo notable fue una relación de causa y efecto entre el aumento del ancho de distribución de las plaquetas y el riesgo de enfermedad de Parkinson, lo que sugiere que los parámetros de las plaquetas podrían ser biomarcadores potenciales para la detección temprana de la enfermedad de Parkinson.
"También identificamos numerosos genes compartidos por medidas específicas de células sanguíneas y trastornos cerebrales, algunos de los cuales son objetivos de medicamentos que están aprobados para otras afecciones; esto representa un potencial para reutilizar esos medicamentos para trastornos cerebrales comunes", tal como apuntó el Dr. Yang.
Los hallazgos obtenidos "proporcionan una base para el trabajo futuro para mejorar la prevención y el pronóstico de enfermedades neurológicas y trastornos psiquiátricos comunes", según otro de los autores, el prof Gratten.
