Cada vez más personas practican algún tipo de actividad deportiva, y la farmacia tiene la oportunidad de erigirse como el centro de referencia en todo lo relacionado con la salud deportiva. El farmacéutico, como profesional sanitario más accesible para la población, debe saber identificar las necesidades que se originan antes, ...
Cada vez más personas practican algún tipo de actividad deportiva, y la farmacia tiene la oportunidad de erigirse como el centro de referencia en todo lo relacionado con la salud deportiva. El farmacéutico, como profesional sanitario más accesible para la población, debe saber identificar las necesidades que se originan antes, durante y después de practicar deporte. Precisamente, el objetivo de este artículo es centrarnos en el `después´. Y es que, tan importante es el entrenamiento como la recuperación posterior, que ayudará al deportista a llegar de manera óptima a la próxima sesión. Pero, ¿cómo hacerlo correctamente?
Después de un gran esfuerzo es muy importante realizar estiramientos durante 20 o 30 minutos. De este modo, se reduce la tensión para devolver los músculos a un estado relajado, se corrige la postura y se ayuda a disminuir los dolores articulares. También se puede optar por realizar masajes, que contribuirán a eliminar la fatiga y a relajar el cuerpo. La mejor manera de hacerlos es a ritmo lento y buscando la profundidad para tratar los músculos que estén sobrecargados: el objetivo es aumentar la reabsorción de toxinas y potenciar el retorno venoso y la difusión del ácido láctico al sistema linfático.
Descansar correctamente también es clave para que el cuerpo vuelva a su estado de equilibro y pueda asimilar bien las cargas de peso. Así, se contribuye a la recuperación del organismo. El objetivo es dar un respiro tanto a los tejidos como a los músculos. Cada tipo de ejercicio tiene su propio tiempo de recuperación, según varios factores (ejercicio anaeróbico o aeróbico, por ejemplo). Y, por supuesto, el sueño es esencial para recuperar energía, por lo que hay que saber diferenciar entre dormir mucho o tener un descanso de calidad. Una falta de descanso puede promover la aparición del síndrome del sobreentrenamiento, entre otros factores. Pero no solamente es fundamental el descanso físico, sino también el mental. El deporte ayuda a despejar la mente y a generar endorfinas, haciéndolo perfecto para recargar pilas.
El papel de la nutrición
Seguir una alimentación variada y equilibrada es esencial para mantener un estilo de vida saludable. Asimismo, las personas que son deportistas requieren más que una dieta estándar para garantizar que su cuerpo se recupere de forma óptima. Por ejemplo, después de practicar deporte es necesario ingerir de forma rápida alimentos ricos en proteínas (atún, pavo, huevo) y en carbohidratos, que contribuyen a reducir el dolor muscular y a lograr una recuperación más rápida. Si no es posible llevar encima estos alimentos, una alternativa es la nutrición deportiva, que debe ir ajustada a las necesidades y a la práctica deportiva en cuestión. Los complementos alimenticios o los suplementos deportivos contribuyen a completar o suplir algún componente nutricional que, en la ingesta diaria, no es posible ingerir a través de la dieta. En este sentido, existen productos post entreno que representan una solución óptima para mejorar la utilización de energía y potenciar alguna cualidad física, ya que contribuyen al funcionamiento y al metabolismo normal de los músculos y ayudan a disminuir la fatiga, a la vez que aumentan y conservan la masa muscular.
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