Ya Hipócrates decía que "tu alimento sea tu medicamento". En la sesión de innovación Interacciones alimento-medicamento: el valor del farmacéutico comunitario en su detección, este miércoles por la tarde, en el 23 Congreso Nacional Farmacéutico, se presentó, a través de los ejemplos más comunes, la relevancia que la alimentación tiene ...
Ya Hipócrates decía que "tu alimento sea tu medicamento". En la sesión de innovación Interacciones alimento-medicamento: el valor del farmacéutico comunitario en su detección, este miércoles por la tarde, en el 23 Congreso Nacional Farmacéutico, se presentó, a través de los ejemplos más comunes, la relevancia que la alimentación tiene en la eficacia y seguridad de los tratamientos farmacológicos.
Aquilino García Perea, vocal nacional de Alimentación del Consejo General de Farmacéuticos, defendió que los farmacéuticos nutricionistas son los más idóneos para este tema. Se refirió al libro Interacciones entre alimentos y medicamentos, elaborado por 37 autores.
Carmen del Campo Arroyo, co-coordinadora del grupo de trabajo ´Interacciones alimento-medicamento´ de la Vocalía Nacional de Alimentación del Consejo General de Farmacéuticos, indicó que en el libro han profundizado en todas las interacciones en las que tienen relevancia clínica. Ahora, con una campaña, se han lanzado unas infografías para sensibilizar a la población de que la interacción entre medicamentos y alimentación tiene su importancia. El libro es una guía de consulta dirigida a todos los profesionales que trabajan con los alimentos y los medicamentos. En él, se incluyen las principales interacciones y los consejos de mostrador relacionados con ellas. Recomendó ser "especialmente sensibles" a la hora de dar ese consejo.
Hay una parte en la que se habla de alimentos que son importantes en esta cuestión. Advirtió de que la posible interacción provocará un cambio en la eficacia o en la seguridad del fármaco. Lo que se quiere conseguir es que el alimento sea la primera parte que vaya a conseguir mejorar la salud del paciente. La máxima es llegar a la adherencia terapéutica. Hay que conseguir que el paciente se adhiera al fármaco sin que el alimento interfiera en él.
¿Con o sin alimento? Las interacciones son el resultado de las interferencias posibles. Dependerá del alimento o nutriente, del medicamento y del paciente. La consecuencia puede tener un beneficio terapéutico, puede ser desfavorable o que no haya relevancia clínica. La interacción se produce en el organismo. Si es el alimento sobre el medicamento, es que los nutrientes pueden modificar a los medicamentos. Si es el medicamento sobre el alimento, es que el medicamento puede alterar la absorción del alimento. Desgranó las alteraciones físico-química, farmacocinética y farmacodinámicas. Destacó que hay que facilitar la labor de "qué como". El papel del farmacéutico es que el paciente salga de la farmacia con todo muy claro. El farmacéutico necesita herramientas ágiles que le indiquen si un medicamento se toma con alimento o no, para que salten alertas. Otros factores que influyen es que "tenemos un montón de tribus alimentarias", lo que complica las interacciones, y que el arsenal terapéutico va aumentando. Subrayó que la metformina es uno de los fármacos más utilizados y que tiene interacciones. Todos los capítulos del libro tienen unas tablas con medicamentos y posibles interacciones. Los fármacos han de tomarse con agua, no con zumos. Por cierto, hay que evitar el paracetamol con era o manzana para que su efecto sea más rápido.
