Arrojan luz sobre el impacto de virus respiratorios comunes en eventos cardiovasculares 

Las infecciones virales respiratorias pueden desencadenar eventos cardiovasculares agudos. El conocimiento de las asociaciones relativas de diferentes patógenos con los resultados de enfermedades cardiovasculares agudas resulta de interés para guiar posibles estrategias preventivas. Así, al menos, lo han considerado investigadores de la Universidad de Melbourne y el Murdoch Research Children's Institute (MCRI) (Australia), lo que les ha llevado a la realización de un metanálisis exhaustivo y a una revisión sistemática para investigar los virus respiratorios comunes y su papel en eventos cardiovasculares como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.

"Cada vez hay más pruebas de que estos virus pueden desencadenar infartos y accidentes cerebrovasculares, pero hasta la fecha se ha prestado especial atención a la gripe", señaló, al respecto, Tu Nguyen, doctoranda del grupo de investigación en Epidemiología e Informática del Instituto de Investigación Infantil Murdoch y del Departamento de Pediatría de la Universidad de Melbourne.

El objetivo principal fue revisar sistemáticamente la evidencia de estudios epidemiológicos analíticos, aleatorizados o no, sobre virus respiratorios identificados mediante pruebas de confirmación de laboratorio en humanos de todas las edades y zonas geográficas. La investigación, publicada en la revista 'Cardiovascular Research' , se centró en las infecciones confirmadas por laboratorio y puede tener implicaciones potenciales para los grupos de riesgo, particularmente en la temporada de resfriados y gripe. "Los adultos mayores son más vulnerables a eventos graves como infartos o accidentes cerebrovasculares que pueden surgir de estas infecciones. Por eso, estudiar esta relación nos ayuda a comprender estos riesgos a nivel comunitario", indicó Tu Nguyen.

Patógenos clave

En el transcurso de su investigación, los autores del trabajo pudieron comprobar que los virus respiratorios comunes influyen en el desencadenamiento de eventos cardiovasculares agudos, pero la solidez de este vínculo varía según el virus. Los patógenos clave de interés fueron el SARS-CoV-2 y la influenza, que se asociaron con un mayor riesgo de accidente cerebrovascular.

"Aunque los mecanismos exactos no están claros, la teoría predominante es que la aterosclerosis puede ser inducida por la activación de biomarcadores inflamatorios en la fase aguda de la infección", de acuerdo con dichos expertos. En general, se cree que los mecanismos biológicos por los cuales el SARS-CoV-2 y los virus de la influenza pueden contribuir a la aterosclerosis están asociados con cascadas inflamatorias desencadenadas por una gran variedad de patógenos.

En síntesis, este estudio puede aportar nuevos conocimientos al proporcionar una visión completa del papel de múltiples virus respiratorios y los patógenos más fuertemente asociados con cada desenlace. "Esta investigación nos proporciona más conocimiento sobre por qué es importante que los mayores prevengan las infecciones respiratorias, siempre que sea posible, dados los posibles factores de riesgo", tal como expuso, por su parte, el prof. Jim Buttery, jefe del Grupo de Investigación en Informática Epidemiológica del MCRI y profesor de Informática de Salud Infantil de la Universidad de Melbourne