Estado: Esperando
El citomegalovirus (CMV) es conocido como un virus del herpes que infecta a la mayoría de la población adulta mundial, penetra en las células que recubren los vasos sanguíneos y contribuye a la enfermedad vascular. Sin embargo, si la infectada es una mujer embarazada, puede causar graves defectos congénitos además de otras complicaciones en pacientes inmunodeprimidos, incluidas las personas que ...
El citomegalovirus (CMV) es conocido como un virus del herpes que infecta a la mayoría de la población adulta mundial, penetra en las células que recubren los vasos sanguíneos y contribuye a la enfermedad vascular. Sin embargo, si la infectada es una mujer embarazada, puede causar graves defectos congénitos además de otras complicaciones en pacientes inmunodeprimidos, incluidas las personas que han recibido trasplantes de órganos.
Al respecto, una reciente investigación de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pittsburgh (EEUU) y el Instituto de Inmunología de La Jolla revela una estrategia para desarrollar una terapia contra el CMV, según se publica en 'Nature Microbiology'. Los resultados de la investigación sugieren, además, que otros virus de la familia del herpes, como el virus de Epstein-Barr y el de la varicela, podrían usar estructuras moleculares similares para propagarse de una célula infectada a otra, evitando la detección inmunitaria.
Evasión frustrada
"Realmente, encontramos una pieza clave que podría dar respuesta al porqué del fracaso de los esfuerzos de inmunización contra el CMV"."Si desconocemos las armas que utiliza el enemigo es difícil protegernos", indicó el autor principal, el Dr. Jeremy Kamil, profesor asociado de microbiología y genética molecular en Pitt.
Debido al gran tamaño de su genoma y a su compleja maquinaria molecular, el citomegalovirus evadió durante mucho tiempo los intentos de desarrollar tratamientos profilácticos. Al igual que otros virus del herpes, el CMV depende de una proteína llamada gH para ingresar a las células del revestimiento de los vasos sanguíneos . Pero a diferencia de otros virus del herpes, que utilizan una proteína asociada llamada gL para facilitar la infección, estos investigadores observaron que el CMV reemplaza gL con otra proteína asociada llamada UL116 y recluta una proteína llamada UL141 . El complejo resultante de gH-UL116-UL141, llamado GATE por los autores, se convierte entonces en una herramienta alternativa para penetrar en las células que recubren los vasos sanguíneos y causar daño interno, a la vez que impide que el propio sistema inmunitario del cuerpo reconozca los signos de infección.
"Los intentos previos de generar una vacuna contra el CMV han fracasado, pero eso fue antes de que identificáramos el complejo GATE. Esperamos que las nuevas estrategias dirigidas a GATE mejoren nuestras posibilidades de combatir la infección por CMV y, quizás, también eliminen esta infección crónica de nuestros cuerpos", afirmó el Dr. Chris Benedict, profesor asociado del Instituto de Inmunología de La Jolla. y coautor principal del estudio.
Los autores consideran que si se logran desarrollar medicamentos antivirales o vacunas que inhiban la entrada del CMV, se podrá hacer frente a numerosas enfermedades que el CMV causa en futuros bebés y personas inmunodeprimidas.