Estado: Esperando
Con motivo del Día Mundial del Farmacéutico, el sector vuelve a poner sobre la mesa uno de sus mayores desafíos: la falta de digitalización. Aunque los hábitos de consumo han cambiado de forma radical en los últimos años, gran parte de la red de farmacias españolas aún no ha dado ...
Con motivo del Día Mundial del Farmacéutico, el sector vuelve a poner sobre la mesa uno de sus mayores desafíos: la falta de digitalización. Aunque los hábitos de consumo han cambiado de forma radical en los últimos años, gran parte de la red de farmacias españolas aún no ha dado el salto al entorno digital, lo que amenaza su competitividad frente a grandes plataformas que han logrado consolidarse en este mercado.
La situación es especialmente compleja en España, donde la legislación limita la venta online de medicamentos. Los fármacos con receta no pueden comercializarse en internet y los que no la requieren solo están disponibles en un reducido grupo de farmacias autorizadas. En este contexto, la parafarmacia se ha convertido en la puerta de entrada al comercio digital, con modelos innovadores y consolidados que buscan integrar a las boticas en el nuevo ecosistema de consumo.
Un mercado que crece, pero que deja atrás a muchas farmacias
Los datos del último estudio de LUDA Partners, empresa tecnológica que conecta farmacias con la venta online de parafarmacia, muestran una realidad clara: la demanda está ahí, pero no todas las farmacias están sabiendo aprovecharla. Se estima que menos del 15% de las farmacias del país venden productos de parafarmacia online, y esta cifra se reduce aún más cuando se trata de medicamentos sin receta.
Los artículos más solicitados fueron los relacionados con la gripe y el resfriado (16 %), test de autodiagnóstico - Covid y embarazo- (14 %), botiquín básico (13 %) y productos de salud sexual (10 %).
El informe confirma que las farmacias que han apostado por la digitalización y la colaboración con plataformas tecnológicas están captando una parte creciente de las ventas online. Sin embargo, miles de boticas, especialmente las más pequeñas y rurales, permanecen desconectadas y sin acceso a este canal en expansión.
El riesgo: perder relevancia en un mercado que ya es digital
Para LUDA Partners, el reto no es solo tecnológico, sino estratégico: integrar el canal online sin perder la esencia de la farmacia comunitaria, que sigue siendo un espacio de proximidad y confianza. "El consumidor ha cambiado: quiere inmediatez, comodidad y calidad, y si la farmacia no está presente en el entorno digital, otros ocuparán ese espacio", señalan desde la compañía.
La falta de digitalización amenaza con ampliar la brecha entre farmacias adaptadas y aquellas que todavía dependen únicamente del modelo físico. En un mercado donde los gigantes del comercio electrónico avanzan con rapidez, la farmacia española corre el riesgo de quedarse atrás si no acelera su transformación.
El futuro pasa por la colaboración y aceptar los cambios
En este contexto, el estudio también subraya que la clave está en los modelos colaborativos que cuenten con la farmacia, alianzas entre boticas, laboratorios y plataformas que permitan aprovechar las ventajas de la digitalización sin perder la esencia de estos establecimientos sanitarios. De este modo, las farmacias pueden competir en igualdad de condiciones, ofreciendo un servicio cercano, ágil y de calidad que responda a las nuevas demandas del consumidor.
Por último, el informe recuerda que la venta online de parafarmacia no es un cambio aislado: en muchos países, la comercialización de medicamentos sin receta (OTC) a través de internet ya es habitual, lo que evidencia que España está rezagada en este ámbito. La conclusión es clara: digitalizarse ya no es una opción, sino una necesidad para garantizar la vigencia y relevancia de la farmacia en un mercado cada vez más conectado.