Demuestran cómo los microplásticos destruyen los huesos y contribuyen a patologías osteoporóticas

Los microplásticos, cada vez más presentes en el entorno humano, podrían ser una posible causa ambiental controlable en relación al aumento en el número de fracturas óseas debido al impacto de estos residuos en los huesos.

Estado: Esperando

29/09/2025

La cada vez mayor presencia de microplásticos y nanoplásticos (MP) en el entorno humano está causando una elevada preocupación sanitaria debido a la amplia evidencia científica sobre sus efectos en el organismo, tras haberse detectado MP no solo en la sangre, el cerebro, sino también en la placenta, la leche materna ...

La cada vez mayor presencia de microplásticos y nanoplásticos (MP) en el entorno humano está causando una elevada preocupación sanitaria debido a la amplia evidencia científica sobre sus efectos en el organismo, tras haberse detectado MP no solo en la sangre, el cerebro, sino también en la placenta, la leche materna y ahora, además, en los huesos humanos.

Así lo revela un estudio publicado en la revista 'Osteoporosis International' que constata cómo los microplásticos  han perjudicado la salud ósea de diversas maneras. Un ejemplo notable es su capacidad para afectar la función de las células madre de la médula ósea al promover la formación de osteoclastos, células multinucleadas que degradan el tejido mediante un proceso conocido como resorción ósea.

Al respecto, la senescencia acelerada de los osteoclastos puede comprometer la microestructura ósea, causando displasia. Esto puede provocar debilitamiento óseo, deformidades y fracturas potencialmente patológicas.

"El impacto potencial de los microplásticos en los huesos es objeto de estudios científicos y no es despreciable. Por ejemplo, estudios in vitro con células de tejido óseo han demostrado que los microplásticos perjudican la viabilidad celular, aceleran el envejecimiento celular y alteran la diferenciación celular, además de promover la inflamación", indicó el Dr. Rodrigo Bueno de Oliveira, coordinador del Laboratorio de Estudios Minerales y Óseos en Nefrología (LEMON) de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Estatal de Campinas (FCM-UNICAMP), en el estado de São Paulo (Brasil).

"Los efectos adversos observados culminaron, de forma preocupante, en la interrupción del crecimiento esquelético de los animales", agregó el investigador. La senescencia acelerada de los osteoclastos puede comprometer la microestructura ósea, causando displasia. Esto puede provocar debilitamiento óseo, deformidades y fracturas potencialmente patológicas.  "Lo más sorprendente es que un importante número de investigaciones sugiere que los microplásticos pueden penetrar profundamente en el tejido óseo, como la médula ósea, y potencialmente causar alteraciones en su metabolismo", según el mencionado experto.

La osteoporosis, en aumento

La prevalencia de fracturas relacionadas con la osteoporosis está aumentando a nivel mundial debido al envejecimiento de la población. Se estima que para 2050 habrá un aumento del 32 % en las fracturas relacionadas con la osteoporosis. 

Es por ello que mejorar la calidad de vida y reducir el riesgo de complicaciones óseas, como las fracturas, es una prioridad en la atención médica. En este sentido, prácticas como el ejercicio físico, una dieta equilibrada y los tratamientos farmacológicos contribuyen significativamente a ello.

"Sin embargo, aunque las enfermedades osteometabólicas se comprenden relativamente bien, existe una brecha en nuestro conocimiento sobre la influencia de los microplásticos en su desarrollo. Por lo tanto, uno de nuestros objetivos es generar evidencia que sugiera que los microplásticos podrían ser una posible causa ambiental controlable para explicar, por ejemplo, el aumento en el número proyectado de fracturas óseas, concluyó el prof. Oliveira. 

Autor: IM Farmacias
Terapéutica con probióticos específicos para evitar las recurrencias de las piedras de riñón