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"La piel nunca miente". Con esta contundencia se expresó Elisa Blázquez, nutricionista de la Clínica Integrativa y directora del Departamento de Nutrición de la Clínica IQTRA Medicina Avanzada, durante su ponencia titulada `Impacto del deporte en la piel', celebrada durante la 5ª edición de DermoCOFM, el congreso de dermofarmacia organizado ...
"La piel nunca miente". Con esta contundencia se expresó Elisa Blázquez, nutricionista de la Clínica Integrativa y directora del Departamento de Nutrición de la Clínica IQTRA Medicina Avanzada, durante su ponencia titulada `Impacto del deporte en la piel', celebrada durante la 5ª edición de DermoCOFM, el congreso de dermofarmacia organizado por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM) bajo el lema `La farmacia en tu piel'.
"La piel actúa como el primer reflejo del estado interno del organismo y refleja cada kilómetro que corremos, cada comida que elegimos y el sueño que hemos tenido", afirmó Blázquez. La nutricionista destacó cómo el ejercicio físico, la alimentación y el descanso se ven directamente reflejados en la salud cutánea. La piel, como órgano más grande del cuerpo, puede ser una excelente herramienta para detectar desequilibrios nutricionales o metabólicos, un terreno donde el farmacéutico tiene mucho que aportar.
Desde el mostrador, el farmacéutico puede detectar señales de alerta y recomendar tratamientos tópicos, estrategias nutricionales o suplementación personalizada. Según Blázquez, "más del 50 % de los pacientes con problemas dermatológicos presentan alteraciones nutricionales o intestinales asociadas", lo que refuerza la necesidad de un enfoque integrativo que no se limite al tratamiento superficial.
La práctica deportiva tiene múltiples beneficios para la piel: mejora la circulación y la oxigenación, modula el estrés, regula el sueño y estimula la síntesis de colágeno y elastina. Sin embargo, si no se acompaña de una nutrición adecuada, los efectos positivos pueden revertirse. "Un déficit de proteínas, una hidratación insuficiente o una alimentación pobre en antioxidantes pueden traducirse en una piel más seca, con menor elasticidad y más propensa al envejecimiento prematuro", destacó la experta.
La proteína juega un papel fundamental en la regeneración celular. "Colágeno, elastina y queratina, todas proteínas estructurales de la piel, dependen directamente del consumo proteico adecuado", explicó Blázquez. Aquí, el farmacéutico puede ayudar al ciudadano a calcular sus necesidades diarias de proteínas, un aspecto crítico especialmente en mujeres menopáusicas, personas mayores y deportistas. "Una mujer de 60 kg en menopausia necesita alrededor de 90 g de proteína al día, pero muchas apenas consumen la mitad", alertó.
En este sentido, el farmacéutico puede orientar sobre requerimientos nutricionales personalizados, suplementación adecuada y el equilibrio entre ejercicio, dieta y cuidados tópicos. "El profesional de la farmacia es un aliado accesible para prevenir y detectar señales que la piel manifiesta antes de que se conviertan en patologías", subrayó Blázquez.
También se abordó el impacto del estrés oxidativo inducido por el ejercicio. "El deporte genera radicales libres que, en dosis moderadas, activan mecanismos de defensa celular -un fenómeno conocido como hormesis-, pero en exceso y sin suficientes antioxidantes, pueden acelerar el envejecimiento cutáneo", advirtió. En este contexto, el farmacéutico puede recomendar suplementos antioxidantes y estrategias nutricionales para proteger la piel.
A través de dos casos clínicos, Blázquez ilustró la conexión entre estilo de vida, nutrición, piel y rendimiento deportivo: una mujer de 45 años con piel apagada tras la menopausia, y un joven deportista con acné persistente y desequilibrio nutricional. En ambos casos, la intervención desde la farmacia puede marcar la diferencia tanto en la prevención como en el tratamiento.
En conclusión, la piel es un reflejo fiel de la salud interna y responde directamente al estilo de vida. El deporte, si se realiza de forma equilibrada y acompañado de una alimentación adecuada, puede mejorar de forma visible la calidad de la piel. "El farmacéutico es una figura clave para ayudar al ciudadano activo a cuidar su piel desde dentro y desde fuera", concluyó Blázquez.