Es evidente que la farmacia no ha vivido una época de cambios, sino un cambio de época.
Ante cambios importantes, las profesiones, o evolucionan y se adaptan o corren el riesgo de debilitarse, y hasta de morir. La farmacia se encuentra en un punto de inflexión, que no es el primero a lo largo de su historia, ni será el último.
Estado: Esperando
Ignacio Falcón Ruiz (Farmacéutico comunitario) Nuestro rol como especialistas del medicamento aporta a la sociedad un gran valor, reconocido por los ciudadanos y por la Administración. Un valor profesional que actualmente se retribuye a través del margen por rotación de los productos que dispensan. El problema surge cuando, a causa de ...
Ignacio Falcón Ruiz (Farmacéutico comunitario)
Nuestro rol como especialistas del medicamento aporta a la sociedad un gran valor, reconocido por los ciudadanos y por la Administración. Un valor profesional que actualmente se retribuye a través del margen por rotación de los productos que dispensan. El problema surge cuando, a causa de la crisis, se decretan duras medidas de ajuste en el gasto que han reducido enormemente el mercado, un 24,8% en volumen de negocio, y un 39% en margen en los últimos cinco años.
Si no se tratase de un sector tan regulado y un valor sanitario tan estratégico, la solución llegaría por la propia ley del libre mercado, y una de las consecuencias habría sido el cierre ya, o en breve espacio de tiempo, de entre un 20% a un 25% de las farmacias actuales, por autorregulación.
No debe ser éste el caso de la farmacia, si no se quiere debilitar aún más el tan deseado y defendido estado de bienestar, del que la farmacia forma parte esencial, por su cercanía a la población, su accesibilidad y la aportación de un consejo farmacéutico diario a millones de ciudadanos. De no existir este consejo, colapsaría sin duda el sistema sanitario español, ya de por si debilitado en esta época de recortes.
Mi opinión al respecto se centra en dos grandes líneas de debate. Por un lado, las propuestas encaminadas a transformar nuestro actual modelo de negocio basado en el margen por rotación, en un modelo basado en el pago por acto de dispensación, independiente del precio del medicamento. Por otro lado, un modelo más basado en los servicios retribuidos, propuestas orientadas a desarrollar nuevas alternativas de negocio, basadas en que además de seguir siendo los profesionales del medicamento, comencemos a ser también profesionales de la salud, ofreciendo nuevos servicios orientados a la prevención y la promoción de la salud. Nuevos servicios como cribados de diferentes patologías, deshabituación tabáquica, servicios de dietética y nutrición, test de intolerancias alimentarias, dermoconsulta, prevención cardiovascular, prevención de la diabetes, prevención de la osteoporosis, PSA, etc.