Suplementos de hierro contra la fatiga

El hierro es uno de los elementos clave en nuestro organismo, y está relacionado con nuestra vitalidad, energía, o por el contrario el cansancio o la fatiga. Un aporte adecuado en momentos clave como los cambios de estación, puede darnos el empujón que nos falta.

Estado: Esperando

08/05/2014

Lo que se conoce como astenia primaveral u otoñal no es más que una de las maneras de denominar esa especie de desánimo, apatía o cansancio que sentimos, en mayor o menor medida, cuando llega el cambio de estación. Durante el otoño y el invierno hace más frío, los días ...

Lo que se conoce como astenia primaveral u otoñal no es más que una de las maneras de denominar esa especie de desánimo, apatía o cansancio que sentimos, en mayor o menor medida, cuando llega el cambio de estación. Durante el otoño y el invierno hace más frío, los días son más cortos y nuestro cuerpo activa la “hormona del sueño” (melatonina).

En el transcurso de la primavera y el otoño, una de cada tres personas experimenta una fatiga crónica que conduce a una disminución de la capacidad de rendimiento y la concentración, cansancio, debilidad, falta de perseverancia, irritación y cambios de ánimo. Síntomas como palidez, falta de concentración, sentir frío o cansancio a menudo, pérdida de cabello, uñas quebradizas o enfermar con facilidad, fácilmente pueden corresponder a una carencia de hierro. Este déficit puede deberse a la alimentación o a dificultades en la absorción de hierro. Ciertas alteraciones del tracto digestivo o de otras funciones fisiológicas pueden impedir o dificultar la absorción de hierro. Una falta de hierro incipiente o existente desde hace ya tiempo puede manifestarse de maneras muy diversas.

La deficiencia de hierro es la causa más frecuente de anemia en el niño, especialmente en edad preescolar y entre los 6 y 24 meses de edad. El recién nacido tiene reservas de hierro hasta los 4-6 meses de edad, debido al aporte de hierro materno intrauterino. El hierro de la madre se aporta al bebé durante el tercer trimestre del embarazo, por lo que los bebés prematuros pueden desarrollar anemia ferropénica. A partir de los 6 meses, el aporte de hierro al bebé depende únicamente de la dieta. La cantidad de hierro en el organismo es un equilibrio entre el aporte externo y las demandas fisiológicas. Hay etapas vitales clave en las que es posible que se requiera un aporte extra de hierro: durante el primer año de vida, en la adolescencia para ambos sexos, durante el embarazo y en bebés prematuros.

Autor: IM Farmacias