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el farmacéutico | 14 “Ahora hacemos más servicio a domicilio a pacientes con factores de riesgo y también nos hemos convertido en rastreadores” colaboración de las instituciones. “La admini- stración debe valorar nuestra aportación para así descongestionar laatenciónprimaria en los centrosde salud”, asegura Pilar, y concluye: “De estaforma,además,ayudaríaalasostenibilidad de la farmacia sobre todo en el caso de las boti- cas que se encuentran en zonas despobladas y dispersas yque, aunquenosonviables económ- icamente, no quieren cerrar y dejar de atender a esa población en algo tan importante como la accesibilidad al medicamento”. En palabras de esta experimentada far- macéutica los recortes, copagos e impagos vienen “por una insu ciente gestión y control del gasto sanitariodesdehaceaños”. Si el gasto sanitario se gestionara bien “no haría falta ni recortes ni copagos ni habría impagos”. El futuropasa, pues, pormejorar lagestióndel gasto sanitarioypor una apuestadecididapor la farmacia como agente esencial de salud. “A pesar de todo soy optimista. Continuamente tenemos que estar demostrando a ciertos estamentos que los farmacéuticos valemos y somos imprescindibles para que el sistema sa- nitariono se colapse, peromientras la sociedad y nuestros pacientes nos sigan queriendo tanto, necesitando y demostrándolo, siem- pre estaremos ahí”. Borja Arnáez (País Vasco) Borja ha vivido la profesión desde pequeño, su padre era farmacéutico y su infancia trans- currió en la antigua botica. “Empecé a ejercer en el año 1988 cuando asumí la titularidad de la farmacia en la que actualmente trabajo en Portugalete. Lo que más me satisface es la cer- canía con el paciente y que muchas veces es al primer lugar al que se dirige para contarte sus preocupaciones, ya que se crea unos vínculos muy estrechos con algunos pacientes” Unaprofesióncercanayviva. “Nuestrospacien- tes suelenserpersonasmayoresdebidotambién a nuestra localización. Nos encontramos en la parte vieja de Portugalete, municipio de poco más de 40mil habitantes”. La farmacia de Borja está especializada en la atención de los centros sociosanitarios, a los que suministra lamedicaciónde los residentes en sistemas de dosi cación semanales, ade- más de en la atención farmacéutica. “Creoque la farmacia juega un papel muy importante en laatenciónprimariayaqueeselestablecimiento sanitariomás cercanoydemás fácil accesopara todos ciudadanos”. Cierto es, y esto ha quedado patente en los meses de pandemia. “El modelo continúa sin apenas variabilidades. Lo que sí ha cambiado es la manera de ejercer la profesión: antes estaba más encaminada a los medicamentos, era esencial tener un buen abastecimiento y conservación de los mismos, ahora está más dirigida al paciente”. A pesar de ser un modelo consolidado tam- bién ha sufrido las consecuencias de la crisis. “El futuro cercano lo veo difícil debido a la crisis sanitaria y económica de la que tardaremos unos años en recuperarnos”, advierte Borja, pero tambiénpuede representar “unaoportu- nidad para evolucionar, para crecer y profundi- zar enunos servicios de calidadorientados a las necesidades que demanda la sociedad”. Entre los principales retos se encuentran “mejorar la atención domiciliaria a las perso- nas más vulnerables y establecer una nueva organización de los centros sociosanitarios en unidades convivenciales más pequeñas de manera que se parezcan más a los domicilios y menos a los hospitales”. En cuanto a las recetas de futuro, Borja lo tiene claro: "La farmaciadebe seguir siendouncentro sanitario, y como tal, debe prestar los servicios con la calidad y la garantía de que detrás de los mismos hay un profesional especialista en el medicamento”. “La profesión antes se encaminaba más a los medicamentos, ahora está más dirigida al paciente”

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