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mido mucha más carga de la que tenemos normalmente. Los centros de salud cerrados y la difícil accesibilidad a su médico por parte de los pacienteshanhechoaumentarnuestrasconsultasmuchísimo ”,manifiesta Pons . Asimismo, “hemos tenido que potenciar la atención farmacéutica, la indicación farmacéutica y los servicios profesionales farmacéuticos para poder ayudar a la población ante la imposibilidad de acceder a los centros de salud”. En el terreno particular, Asprofa tuvo que anular unas jornadas en Sevilla, junto con el COF de la capital hispalense, para ayudar a dar a conocer y colaborar con las enfermedades raras. “Teníamos también nuestro IV Congreso Asprofa en Málaga y también lo hemos pospuesto, porqueennuestro lemade ‘Juntos somosmás’ necesitamosesapresencia- lidadque tantonos caracteriza. Hemos seguido trabajandoencursos yen laguíadedermoyenpreparar el relevo, porqueyacumplimos cuatroaños en octubre”, expone el presidente de los profesionales farmacéuticos. Un ‘ninguneo’ a la farmacia Comenta, de la misma forma, cuál es la noticia vivida por el sector farmacéutico más importante de los último doce meses. O más concretamente, cuál no lo ha sido. Lamenta “que no nos han dejado hacer absolutamente nada de lo que hemos propuesto a COFs, Consejo y gobiernos, como, poder acceder a las vacunas cuando nos quitaron hasta la de la gripe, pérdidas con los precios de mascarillas, geles...” “Hemos vivido con impotencia las noticias sobre otros países donde las farmacias han podido colaborar en todo, pero aquí no ha habido ese interés”, destaca Pons. También se muestra descontento con las lecciones aprendidas en el sector durante todas las olas del Covid-19. En este sentido, el pre- sidente de Asprofa cree que “no hacemos las cosas bien”. “Pensamos que por saltarnos un día las normas no pasará nada, y mira como fue, ola tras ola. Nuestra labor informativa ha sido a diario y con todos los grupos de edad”, agrega. Con lo cual, destaca, de igual modo, la fidelidad de los farmacéuticos con los pacientes españoles. “El compromiso es que no hemos descansado, no hemos cerrado, la cruz de la farmacia ha estado encendida toda esta pandemia cuando no había nada abierto, no hemos hecho vacaciones, hemos hecho turnos separados para no contagiarnos, hemos dormido en otra habitación, nos hemos cambiado de ropa en el coche... Y aún así, han muerto compañeros por no tirar la toalla y seguir al frente”, evidencia. Sin embargo, lamenta que este compromiso no haya sido recono- cido para nada por parte del Gobierno: “Ni siquiera nos incluía en el grupo de profesionales sanitarios, y daba mucha rabia hacer todo esto y que no te reconozcan nada”. Desde otro prisma, el lado positivo de la crisis sanitaria es que al- gunas iniciativas que se han llevado a cabo en estos meses, y que afectan a la farmacia, han venido para quedarse. En ese sentido, Pons destaca la atención farmacéutica domiciliaria. “ Había comu- nidades en las que, por ley, no está clara o está limitada, y mientras estuvimos en estado de alarma sí que pudieron hacerla todas las comunidades” . Visitar al paciente en su casa “para quitarle la pre- ocupación de no poder venir ”, y tenerlo controlado, es, a su juicio, “altamente satisfactorio”. En esta línea, el presidente de Asprofa tiene poca confianza en el impulso del Ministerio de Sanidad a la incorporación de la dispen- sación no presencial de medicamentos hospitalarios en la nueva Ley de Garantías y Uso Racional del Medicamento. “ La ministra, Carolina Darias, pide que se consolide, cuando ha habido comunida- des en las que ni ha existido, aunque lo hayamos pedido, como aquí en Baleares”, se queja . “Es muy triste que, en tiempos de pandemia mundial, yo tenga que desplazarme a 30 kilómetros al hospital a por lamedicación hospitalaria demi padre solo para queme la entreguen, y no me la puedan enviar ni a la farmacia ni a casa. Entiendo que la primera dispensación sí que requiere de una atención farmacéutica por parte del farmacéutico hospitalario, pero las siguientes no sería tan necesario, podríamos haber tenido una coordinación que aquí en Baleares hemos echado en falta”, aclara. A su juicio, en gran medida se desaprovecha todo el potencial, sani- tario y asistencial de la profesión farmacéutica, si bien es consciente de que cuentan con la confianza plena de los pacientes. “Antes de la pandemia ya era así, y ahora todavía más”, señala, argumentando que “somos los profesionalesmás accesibles para lapoblación, y hemos hecho de psicólogos, dermatólogos, psiquiatras, etc. De todo, porque el gobierno se centró en el Covid-19, pero se ignoró todo lo demás, y noso- tros pasamos de una dispensación activa a una dispensación todavía más activa; sentándonos con el paciente, tranquilizándolo, midiéndole tensión, glucosa, colesterol, saturación de oxígeno, pulso irregular, etc.” La oportunidad después de la crisis Así pues, considera que la pandemia ha sido “una excelente oportuni- dad” para hacer cribados de enfermedades que los centros de salud telefónicamente no pueden ni ver ni resolver, “incluso hemos hecho electros, espirometrías, y controles de factores de riesgo cardiovascular, más que nunca, y gracias a estos cribados, si detectamos algo, poder derivar a los pacientes para que el médico lo valore”.. Respecto a cómo debe ser la reforma del Sistema Nacional de Salud desde el punto de vista del sector farmacéutico, Baltasar Pons señala en primer lugar, que reciban un tratamiento de profesionales sanita- rios. Además, demanda “no ser los únicos que recibamos los recortes de sanidad, clawbacks, subastas y demás” ; así como “ tenernos en cuenta para poder ayudar todavía más: ayudar con las vacunas y considerar alguna de las decenas de propuestas que compañeros han presentado y el Gobierno ni las ha valorado”. Pese a todo, bajo su punto de vista, el modelo español “es la envidia de muchos países” , tal y como ha reconocido la FIP y otros tantos organismos internacionales. No obstante, lo opaca el hecho de que, “en esta pandemia, España ha sido el país que menos libertad ha dado a las farmacias para colaborar en la gestión de la crisis sanitaria”. “ No nos podemos comparar con modelos como el australiano, canadiense y algunos más, pero tenemos un buen modelo farmacéutico con unos servicios profesionales de calidad y con farmacias cercanas en cualquier sitio remoto de España”, justifica. Por todo ello, agradece a todos los profesionales de la farmacia, tanto a los farmacéuticos comunitarios como a auxiliares, técnicos, farma- céuticos y técnicos de hospital, distribución y laboratorios, “su labor intachable frenteaunacrisis sinprecedentes”, concluyendoque, “aunque tengamos de cada díamás trabas y nos lo ponganmás difícil, nos hacen más fuertes y más unidos”. “SOMOS LOS PROFESIONALES MÁS ACCESIBLES PARA LA POBLACIÓN, Y HEMOS HECHO DE PSICÓLOGOS, DERMATÓLOGOS, PSIQUIATRAS…”

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