IMFarmacias_130

el farmacéutico | 18 Javier Ongay (Berriozar - Navarra) Berriozar esunmunicipionavarrodeunosdiez mil habitantes, situado a 6kmde la capital. Allí, en el pueblo que le vio nacer, Javier comenzó su andadura como titular de farmacia: “Antes estuve trabajando en otras farmacias, pero la antiguatitulardemiboticadetodalavida,Teresa, meofreciócubrirunabaja.Finalmente, cuandose jubiló,mequedéconlafarmacia”. Los comienzos no fueron sencillos, pues subió la persiana al inicio de la pandemia, concretamente en diciembre de 2019. Pero “con paciencia y mucho trabajo, todo fue posible”. Su farmacia es el lugar de encuentro de muchos vecinos, una farmacia por y para el barrio: “Lafarmaciatieneunvalor yunpotencial enorme. Somos unode los puntosmás cercanos al paciente que acude periódicamente por su medicación, lo que nos permite detectar y solucionar muchos errores relacionados con la medicación”. Un valor añadido que, al mismo tiempo, supone un gran ahorro al sistema. “Pienso que la farmacia avanza positivamente adaptándosea losnuevos tiempos”, nos con esa Javier, y añadeque “esoesunade lasgrandes virtudes de la farmacia española”. La gran mayoría de sus ventas corresponden a medicamentos: “Esto es así por la esencia de lo que somos. Los servicios complementarios complementan a la perfección a la farmacia, Cristina Iriarte (Pamplona-Navarra) Cristina lleva más de 20 años en la profesión. “Lo que más me gusta de mi labor diaria es la necesidadconstantede formaciónque tenemos para estar al día y para ofrecer la mejor atención", explica. Y es que, para el farmacéutico, es imprescindible la continua actualizaciónde los conocimientos. Nos habla de su farmacia, situada en Pamplona, “una farmacia asistencial, 100x100 de consejo ymuy involucrada con la dermofarmacia”. El per l que más atiende Cristina son personas mayores polimedicadas, aunque también tiene gran demanda en dermofarmacia. “Creo rmementeque tenemos un papel muy importante dentro de la cadena sanitaria, donde todos losprofesionales trabajamosparagarantizarunaatenciónal pacientede calidad”, asegura. ¿Cuál es el mayor cambio en relación con la botica de toda la vida? “Quizá la llegada de internet que, por un lado, permite el acceso a la información por parte de la ciudadanía sin ningún rigor sobre las fuentes consultadas y, por otro, la compra de productos basándose exclusivamente enel precio”. Todo ello, lógicamente, repercute en el sector. Así que: ¿cómo revertir pero nuestra especialidad es el medicamento”. De hecho, Javier de ende que la farmacia sea sostenible simplemente con la venta de medicamentos: “Hay un sinfín de acciones y servicios alrededor del medicamento con las que sepodría trabajar, peronoes posiblepor las bajadas constantes de los precios queas xiana unmodelode farmaciadeunvalor incalculable”. Servicios que, por otra, parte deberían ser remunerados. “Es cierto que hay que valorar lasituaciónparticular de cada farmacia y que, en muchos casos, existeel factor dequehastaciertomomento sehahechogratis. Perodebería existir un acuerdo, una especie de tarifa común”. Javier, sin embargo, ve los próximos años como una oportunidad para seguir creciendo: “Puedo decir, orgullosamente, que hasta ahora mis compañeros han sabido adaptarse a las nuevas situaciones. Ahora nos toca a las nuevas generaciones seguir defendiendo un modelo de farmacia cercano, sostenible y e caz”. esta situación?“Si queremos impulsar los servicios hay que hacer un replanteamiento hacia el consumidor nal de la profesión farmacéutica”, asegura nuestra entrevistada, y continúa: “Los usuariosacudenaotrosprofesionalesde lasalud yestándispuestosapagarpor sus servicios, pero en la o cina de farmacia es distinto. El hecho de que seamos tan accesibles a la población hace que, a veces, no se valore económicamente los servicios que ofrecemos”. Servicios que, por otra parte, revalorizan la apuesta en saludque realiza la farmacia. Claro está, es un camino no exento de desafíos: “Lo que más cuesta no es implantar los servicios, sino cobrar por ellos. Sin lugar a duda, el futuro de la farmacia pasa por implantar servicios remunerados”. Además, los recortes han impactado en un modelo de farmacia que ha demostrado calidad y excelencia: “Siempre he pensado que recortar el gasto sanitario a costa del gasto farmacéuticoes lomás sencillopara la Administración. Lo peor que estamos viviendo son los desabastecimientos de medicamentos, unclarore ejode lapolíticadepreciosqueexiste en torno a los fármacos”. Aun así, Cristina es optimista, segura de la “Las bajadas constantes de los precios asfixian a un modelo de farmacia de un valor incalculable” “Lo que más cuesta no es implantar los servicios, sino cobrar por ellos” fortaleza de un sector que, una vez más, ha demostrado su esencialidad: “Vamos a ir evolucionandohaciauna especialización. El futuro seguirá siendo la farmacia asistencial con una buena atención al paciente y con servicios que apoyen la profesión”.

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=