EL FARMACÉUTICO 20 Pedro Manuel Cotrina (Cáceres) “Ser farmacéutico en el entorno rural es tener una clara vocación de servicio al paciente”. Así define su profesión Pedro, farmacéutico comunitario en Hervás, un pueblo turístico enclavado en el precioso entorno de la Comarca del Valle del Ambroz, al norte de Extremadura. Él lleva 14 años dedicándose a lo que más le gusta. “Lo que me apasiona de esta profesión es la satisfacción que te produce saber que estás ayudando a personas que lo necesitan”, asegura. Considera que el modelo no ha cambiado en estos años, pero “sí que vemos que nuestros profesionales son más proactivos a la hora de promocionar la salud y de dar una atención exigente y de calidad a nuestros pacientes”. Y es que, más del 90% de la población, tiene una farmacia con un profesional sanitario de primer nivel a menos de 250 metros de su casa. La farmacia trabaja día a día para mejorar, garantizar y prevenir la salud de las personas. “Ya realizamos muchos servicios asistenciales, lo que pasa es quem como lo hacemos todos los días, no le damos importancia”, argumenta Pedro, y añade algunos ejemplos: “La dispensación lleva un consejo farmacéutico incorporado, trabajamos en la adherencia a los tratamientos, hacemos una detección precoz de infinidad de patologías, hacemos seguimiento farmacoterapéutico, farmacovigilancia, etc.”. Para el farmacéutico, es esencial poner en marcha reformas que refuercen esa capacidad asistencial y preventiva de la farmacia dentro del sistema sanitario: “Si queremos hacer sostenible a largo plazo la oficina de farmacia del futuro -sobre todo en el medio rural-, es necesario apostar por la implantación de una cartera concertada de servicios profesionales que permitan optimizar la farmacoterapia, participar activamente en la salud pública y la vigilancia epidemiológica, y poder, así, prestar una atención integral desde la farmacia rural en las zonas afectadas por el reto demográfico”. Una farmacia reforzada y potenciada que tiene mucho que ofrecer, pero “es preciso hacer entender a las administraciones que las partidas presupuestarias en materia farmacéutica son un ahorro, no un gasto”. La digitalización también será clave para esta farmacia del futuro. En este sentido, recuerda que, “actualmente, tenemos en España varias plataformas de registro de servicios, las cuáles deben ser interoperables dentro de poco tiempo”. El potencial de estas plataformas es muy elevado, pues favorecen la inmediatez del registro y el acceso a la información. Además, “también promueven la comunicación bidireccional con los médicos de Atención Primaria y facilitan la dispensación colaborativa de medicamentos hospitalarios en la oficina de farmacia, evitando así los desplazamientos de pacientes, quea veces son de más de 100 kilómetros”. Sergio Aguilera (Cáceres) “Lo mejor de los farmacéuticos es que somos muy resolutivos y tenemos la capacidad de ayudar a los demás en sus problemas de salud”. Así comienza la entrevista con este experimentado boticario de Extremadura. Sergio comenzó su andadura como farmacéutico adjunto y de óptico en diferentes ciudades como Salamanca y Madrid. Finalmente, surgió la oportunidad de adquirir su propia farmacia en la provincia de Cáceres, y no se lo pensó dos veces: “Mi botica es una farmacia rural donde se intenta dar el mayor apoyo y servicio farmacéutico a los vecinos que nos lo demanda”. Allí, el perfil de paciente es mayoritariamente polimedicado, con un rango de edad que supera los 70 años. Explica que “el modelo de farmacia ha sido cambiante en los últimos años: las modificaciones en la normativa, la bajada de precios o las subastas en algunas CC. AA. han creado cierta incertidumbre dentro del sector”. Cambios que, sin embargo, no han afectado a la naturaleza de servicio público de la farmacia. En su caso, indica que, “en farmacia rural, nos dedicamos sobre todo a la dispensación de medicamentos, ya que la parafarmacia, por falta de conocimiento de los pacientes, apenas tiene salida”. Y prosigue: “En rural es importante educar a los pacientes en materia de salud, por ejemplo a través de pequeños gestos como recordar que una buena salud bucodental previene la aparición de enfermedades. Eso marca la diferencia”. “LO MEJOR DE LOS FARMACÉUTICOS ES QUE SOMOS MUY RESOLUTIVOS Y TENEMOS LA CAPACIDAD DE AYUDAR A LOS DEMÁS EN SUS PROBLEMAS DE SALUD” >>
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