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EL EXPERTO 170 - En los medicamentos, la lactosa es un excipiente de declaración obligatoria que deberá aparecer en la caja del medicamento, prospecto y ficha técnica. • En la farmacia podemos recomendar complementos alimenticios de lactasa para hacer posible la digestión de cualquier lácteo y poder utilizar medicamentos que contengan este excipiente. Enfermedad celíaca Es una enteropatía crónica, autoinmune e inducida por la ingesta de gluten, en individuos genéticamente predispuestos, en la que tiene lugar una inflamación de la mucosa intestinal y destrucción de las microvellosidades intestinales. Respecto a los síntomas, cada vez es menos frecuente su presentación mediante la clínica clásica de malnutrición y diarrea crónica, sobre todo en el adulto, donde es mucho más frecuente su presentación de formas menos sintomáticas, con síntomas digestivos inespecíficos o a través de manifestaciones extraintestinales (anemia ferropénica, dermatitis herpetiforme, osteoporosis, artritis o daño hepático). Su diagnóstico se lleva a cabo por sintomatología compatible, estudio serológico (principalmente, presencia de antitransglutaminasa tisular de tipo IgA), biopsia duodenal y estudio genético. Consejo nutricional y farmacéutico: • Actualmente, el único tratamiento eficaz para la enfermedad celíaca es eliminar de por vida los alimentos que contienen gluten. • Por tanto, se debe excluir de la dieta el trigo (trigo duro, trigo espelta, trigo khorosan), cebada, centeno o sus especies híbridas y derivados. • Respecto a la avena, existe controversia, ya que puede contaminarse de trazas de gluten durante su procesado (contaminación cruzada). • Con respecto a los micronutrientes, puede ser necesaria la reposición, principalmente de hierro, ácido fólico, vitamina B12, calcio, vitamina D y vitamina K y, en determinados pacientes, de cobre, zinc y magnesio. • En relación a los medicamentos, los excipientes que pueden contener gluten son el almidón de trigo, avena, cebada, centeno o triticale. • Son de declaración obligatoria en la caja del medicamento, prospecto y ficha técnica. • Un contenido de gluten en estos excipientes menor de 20ppm, se considera‘sin gluten’. desencadenado por la exposición a distintos tipos de proteínas presentes en los alimentos. Sin embargo, en las intolerancias alimentarias no interviene la respuesta inmunitaria, siendo debidas, en su mayoría, a un déficit enzimático. A parte, otra reacción adversa alimentaria es la enfermedad celíaca, que hay que diferenciarla de la alergia al trigo o de la sensibilidad al gluten no celíaca. Tanto en las alergias alimentarias persistentes como en la enfermedad celíaca, se deberán suprimir los alimentos responsables de estas reacciones y, en el caso de las intolerancias, en función del grado se podrá consumir más o menos cantidad del alimento en cuestión. Por tanto, un diagnóstico correcto es clave para evitar dietas de eliminación innecesarias. Alergias alimentarias mediadas por inmunoglobulina E La mayor parte de las alergias alimentarias se deben a reacciones de hipersensibilidad de tipo I o inmediata, mediadas por IgE, en las que hay una previa sensibilización, es decir, un previo contacto con las proteínas alergénicas de los alimentos. Es en posteriores exposiciones al alérgeno alimentario (inclusive, con mínimas cantidades), cuando tiene lugar la reacción alérgica y la aparición de síntomas muy variables: cutáneos, gastrointestinales, respiratorios o sistémicos (shock anafiláctico, pudiendo causar la muerte). Los alérgenos alimentarios más habituales son proteínas de la leche y sus derivados, de legumbres, huevos, crustáceos, pescado, hortalizas, trigo y otros cereales, y su prevalencia cambia según la edad. Respecto al diagnóstico, se basa en la historia clínica, pruebas cutáneas (prick-test), detección en suero de IgE específicas y prueba de confirmación a través de restricción dietética. Consejo nutricional y farmacéutico: • Las personas con una alergia persistente a un alimento o componente del mismo deben evitar totalmente su consumo y, siempre, el alergólogo valorará a cada paciente de manera individualizada. • Las manifestaciones clínicas agudas de la reacción alérgica serán tratadas con antihistamínicos, corticoides o broncodilatadores y, en reacciones graves, el fármaco de elección será la adrenalina intramuscular. • Actualmente, el proceso de desensibilización oral ya se lleva a cabo con algunos alimentos, como tratamiento curativo (tolerancia inmunológica). • También es importante señalar que proteínas del huevo (lisozima y ovoalbúmina) o de la leche de vaca pueden estar presentes en medicamentos y vacunas, algo reseñable en alérgicos. Intolerancia a la lactosa Es la incapacidad del intestino de digerir la lactosa y transformarla en sus dos azúcares (glucosa y galactosa) debido a la baja actividad de la enzima lactasa presente en la mucosa intestinal. Los síntomas aparecen de 30 minutos a dos horas tras la ingesta del alimento que contenga lactosa y estos son digestivos: náuseas, cólicos, distensión abdominal y diarrea de tipo osmótico (acuosa, explosiva, ácida y acompañada de ruidos hidroaéreos). Su diagnóstico se puede llevar a cabo por medio de diferentes métodos: test de tolerancia a la lactosa, test de hidrógeno espirado con carga de lactosa, test de acidez en deposiciones, biopsia en el intestino delgado y estudio genético. Consejo nutricional y farmacéutico: • Si hay un alto grado de intolerancia a la lactosa será recomendable consumir productos lácteos en los que la lactosa haya sido sustituida por dextrinomaltosa o polímeros de glucosa. • Recurrir al uso de ‘leches vegetales’, como la bebida de soja, aunque, en este caso concreto, habría que tener en cuenta que su contenido en calcio, fósforo, vitamina D y metionina es menor, y la presencia de ácido fítico podría disminuir la biodisponibilidad de algunos minerales. • Por otro lado, si hay una mayor tolerancia a la lactosa, se pueden consumir quesos fermentados o curados y yogures. • Otra recomendación general en la intolerancia a la lactosa es la de evitar el alcohol, ya que, además de influir en el daño de la mucosa gastrointestinal y aumentar la motilidad intestinal, su consumo disminuye los niveles de lactasa. • La lactosa tiene un amplio uso en la industria alimentaria y farmacéutica: - Como aditivo alimentario es frecuente encontrarlo en alimentos no lácteos y procesados. Es importante detenerse en el etiquetado y tener en cuenta que la lactosa puede aparecer como suero lácteo, sólidos de leche o ingredientes modificados de la leche.

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