EN PROFUNDIDAD 102 de mayo, celebraron en el Consejo General la 5ª Jornada ‘La enseñanza de la Atención Farmacéutica en la Universidad’, organizada por el Foro de Atención Farmacéutica en Farmacia Comunitaria (Foro AF-FC), y que en esta ocasión se centró precisamente en las prácticas tuteladas y sirvió para avanzar en la formación práctica y asistencial de los futuros profesionales de las farmacias comunitarias. Puntos de mejora Para Ureña Sánchez, “existe una necesidad clara de dignificar la farmacia comunitaria como salida profesional”. Añade que “muchos pacientes siguen viendo al farmacéutico como el dependiente de un comercio y no como el verdadero profesional sanitario que es”. Esta visión llega a los estudiantes a través de amigos y familiares. “El farmacéutico comunitario debe dejar de centrarse en la pura parte comercial de la farmacia, donde lo único que importa es cuánto hayas facturado al final del día, sin dejarla de lado, porque una farmacia es un negocio y debe ser rentable, y hacer atención farmacéutica de verdad, dedicando tiempo a cada paciente, siguiendo estos protocolos que tanto tiempo han dedicado para enseñarnos y realizando los servicios profesionales farmacéuticos (SPFA)”, alega. El principal problema que aleja a los estudiantes de la farmacia comunitaria es, por un lado, esa percepción de una parte de la sociedad del farmacéutico comunitario como el dependiente de un comercio, “influenciada en parte por no pocas farmacias que se limitan a ser establecimientos comerciales y no centros sanitarios, sumadas a unas condiciones salariales y laborales peores en comparación con otras salidas profesionales, y a una prácticamente nula capacidad de desarrollarse profesionalmente”. Los estudiantes creen que no es un problema de formación, pues empiezan las prácticas tuteladas con unos conocimientos teóricos y prácticos más que suficientes para saber desenvolverse correctamente y empezar a atender a pacientes. “A mayores, esos seis meses de prácticas permiten complementar esa competencia adquirida con la docencia en las aulas”, justifica Ureña Sánchez. “Una parte de la profesión dice que es necesario un título de especialista para trabajar en farmacia comunitaria, pero nosotros no compartimos esta visión, pues consideramos que cuatro-cinco años de formación teórico-práctica en una facultad, donde la mayoría de asignaturas se centran en la farmacia comunitaria, seis meses de prácticas tuteladas y la experiencia profesional adquirida una vez que el estudiante entra en el mercado laboral, es más que suficiente para poder aplicar una serie de protocolos y prestar una serie de servicios que son fundamentales para el desarrollo de la profesión”, aboga. Asevera que, “por desgracia, hay muy pocas farmacias en el conjunto del territorio nacional que realicen todo esto”. Aguilar Santamaría repite que, en este ámbito, es fundamental la asignatura de prácticas tuteladas y están trabajando para que responda a los retos de formación de los estudiantes, así como a las necesidades de los pacientes. La mencionada 5ª Jornada ‘La enseñanza de la Atención Farmacéutica en la Universidad’ sirvió precisamente para avanzar en la formación práctica y asistencial de los futuros profesionales de las farmacias comunitarias. ¿En qué ámbitos se puede colaborar más entre la farmacia comunitaria y los estudiantes de Farmacia? Ureña Sánchez contesta que, por ejemplo, incentivando la participación de los estudiantes en aquellos congresos y eventos que agrupen a los profesionales que trabajen en farmacia comunitaria, pues finalmente dentro de unos años potencialmente serán los que se encuentren atendiendo a los pacientes detrás del mostrador. Otra receta en la que piensa es en “potenciar igualmente la relación entre los representantes de estudiantes (asociaciones y delegaciones de facultad) y los COFs provinciales, así como con las federaciones de adjuntos, con la patronal o con cualquier asociación de profesionales que agrupe a determinado número de profesionales”. “En gran medida, hemos consolidado la colaboración con la incorporación, desde el primer momento, de los estudiantes en la Mesa de la Profesión Farmacéutica a través de la FEEF”, subraya Aguilar Santamaría. Ésta es una Mesa en la que están representadas las 14 organizaciones de farmacia y que ya ha presentado sus primeros trabajos: cuatro documentos de consenso en torno a la Formación, Nuevas Especialidades Farmacéuticas, la Atención Integral al Paciente, y la Seguridad Clínica. Además, el representante de los farmacéuticos españoles destaca otro tema que afecta directamente a los estudiantes, como es la formación de Grado, asunto en el que la Mesa emitió un posicionamiento alertando de los riesgos de la formación semipresencial del Grado en Farmacia y defendiendo que la formación presencial es la que mejor garantiza la calidad académica y la obtención de conocimientos, aptitudes y habilidades necesarias para el desempeño profesional del farmacéutico. Con todo, la FEEF y el CGCOF tienen muy buena relación desde hace algunos años. “Para ellos, somos su referente en lo que a representación estudiantil respecta, y ellos para nosotros son nuestro referente en cuanto al mundo profesional”, expresa Ureña Sánchez. Asegura que siempre que el CGCOF necesita la voz de los estudiantes cuenta con ellos, y suelen participar en casi todos sus eventos presenciales. Mantienen regularmente reuniones con la ejecutiva del Consejo, y participan, como se ha plasmado, en la Mesa de la Profesión Farmacéutica y en sus diferentes grupos de trabajo. Otra muestra concreta de la buena relación es que los estudiantes serán protagonistas activos en el 23 Congreso Nacional Farmacéuticos, que tendrá lugar en Valencia entre los próximos 7 y 9 de febrero de 2024. En primer lugar, durante la jornada del 8 de febrero, 150 estudiantes podrán participar de todas las actividades del Congreso gracias a que éste facilitará el traslado y la inscripción, incluyendo el almuerzo y la cartera de congresista. “Una jornada que, gracias a la colaboración de la Conferencia Nacional de Decanos y la FEEF, permitirá a los futuros farmacéuticos conocer las salidas profesionales del Grado en Farmacia en una mesa redonda específica”, puntualiza Aguilar Santamaría. Por otra parte, un grupo de estudiantes o recién graduados participará en diversas labores organizativas y en la recepción de bienvenida y la cena de clausura. Asimismo, la organización, a través de las Facultades de Farmacia, está promoviendo la presentación de comunicaciones científicas para difundir los trabajos puestos en marcha por docentes y sus estudiantes y mostrar al mundo los destacados proyectos impulsados por el mundo académico. En la Asamblea de la Federación Europea de Estudiantes de Farmacia, en Alcalá de Henares, del 7 al 12 de noviembre, su participación ha sido activa, apoyándoles en varios ámbitos. “El Consejo General es uno de los principales patrocinadores y colabora en la organización de este importante encuentro de una manera global”, pronuncia. Tuvo la oportunidad de intervenir en la presentación en rueda de prensa del encuentro, que se celebró en la sede del Consejo General, y los acompañó en la inauguración. El Consejo General ha tenido allí un stand para que los estudiantes, españoles y del resto de nacionalidades, conozcan la oferta de productos y servicios profesionales que ofrecen a los colegiados. Dentro del programa científico, han organizado un taller para hablar de inteligencia artificial, herramientas digitales y bases de datos; en línea con el eje principal de la Asamblea.
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