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82 REPELENTES DE INSECTOS Repelente y fotopoteccion solar conviven en determinados meses del año. Hay que aplicar el fotoprotector primero, dejar absorber y después aplicar el repelente. Desde la farmacia, es fundamental que se expliquen cuáles son las medidas de protección individual, entre las que se encuentran los repelentes. “Cómo funcionan, cuáles son, entender cómo es el mecanismo de acción de cada uno de ellos, además de otros aspectos, van a ayudar al usuario a garantizar su eficacia. No todos valen para todo el mundo”, detalla Gozalo. Cuando se habla de repelentes, hay que referirse a eficacia y a seguridad. Una vez elegido el repelente adecuado hay que saber que su eficacia depende de la concentración, la frecuencia y la uniformidad de la aplicación. Como norma en general, mayores concentraciones de ingrediente activo proporcionan una mayor duración de la protección, independientemente del ingrediente activo, pero hasta un límite. Eso sí, “hay factores que disminuyen su eficacia”. Hay que tenerlos en cuenta desde la farmacia comunitaria para una correcta indicación. De ahí la importancia de los protocolos de recomendación. La abrasión de la ropa, la capacidad de absorción de la piel, el baño o el lavado de la piel con agua (incluyendo el agua de la lluvia) y los ambientes de altas temperaturas (cada incremento de 10 °C de temperatura disminuye un 50% el tiempo de protección) son esos factores que disminuyen su eficacia. Es importante saber que los repelentes deben estar autorizados o registrados por la autoridad competente, como es el caso de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Sprays, gel, aceite, pulseras y parches. Palma-López especifica que “los pacientes no son muy conscientes del mecanismo de acción de los repelentes y hay un gran desconocimiento de su uso”. No diferencian el que se debe aplicar en la piel y cómo aplicar protección solar conjuntamente, y los repelentes para superficies inanimadas como ropa, cortinas y/o mosquiteras. Nos proporciona consejos de cómo han de aplicarse: Rociar lenta y homogéneamente a una distancia prudencial todo el cuerpo, incluida la piel expuesta. No olvidar la parte superior de los pies y la parte posterior del cuello y las manos. Aplicar repelente en el rostro o en el rostro de un niño rociando primero el repelente en las manos y luego aplicándolo en el rostro. No aplicar el repelente en las manos de los niños, por peligro a que se toquen los ojos o la boca. Lavarse las manos con agua y jabón después de aplicar el repelente. Mantener el repelente fuera del alcance de los niños. Los principios activos imprescindibles que cita son DEET, principio activo no tóxico IR3535, Permetrina y Citriodiol. Bruna concluye que el aumento del turismo rural y del número de mascotas hace que sea de vital importancia la prevención en la trasmisión de enfermedades trasmitidas por vectores. “Los humanos deberemos tomar medidas preventivas clásicas a la hora de viajar, no pensando sólo en la molesta picadura, sino también ser conscientes de las enfermedades que podemos sufrir”, propone. Hay que informarse de las enfermedades que puedan ser características de la zona y, si existen vacunas, realizar una vacunación preventiva para poder disfrutar del viaje. Para ella, sería bueno que las farmacias realizaran campañas de comunicación sobre los riesgos para la salud que pueden suponer las picaduras de estos animales. Si un paciente conocido se sabe que padece alergia a picaduras de mosquitos u otros insectos y piensa realizar un viaje a una zona de riesgo o hacer senderismo, Torres Llamas destaca que se le recomendará que tome precauciones y lleve consigo su medicación de rescate (sprays, inhaladores, cremas, etcétera), haciendo un uso debido y responsable. Se le asesorará en cómo hacerlo. En el caso de que, tras una picadura, se presente dermatitis, exantema, prurito o inflamación, está recomendado el uso de antihistamínicos, corticoides y otros antiinflamatorios para tratar la sintomatología. Claro está, se debe aconsejar al paciente como usar dichos productos y medicamentos. Todos los expertos consultados coinciden en que el papel del farmacéutico es clave en la educación sanitaria del paciente. EL FARMACÉUTICO DEBERÍA SER CAPAZ DE IDENTIFICAR EL TIPO DE PICADURA, YA SEA DE MOSQUITOS, ARAÑAS, ÁCAROS, PULGAS, ETCÉTERA sona, con sus aspectos positivos y negativos. Se le debe explicar cómo hacer un buen uso de los distintos productos, de manera oral y por escrito si es necesario. El farmacéutico debe hacer ver al paciente que puede confiar en él y que estará a su disposición ante cualquier duda nueva que le pueda surgir”, reflexiona. Quizá, “ahora más que nunca, el farmacéutico debe asumir nuevos retos y buscar nuevas herramientas para intervenir de forma positiva en la salud de las personas”. Efecto limitado Todo consejo farmacéutico, en palabras de Gozalo, hay que basarlo en “protocolo=profesionalización=personalización”. Revela que “una de las grandes cuestiones que hay que aclarar de forma proactiva es la duración del efecto, ya que el efecto es limitado”. Cuenta que, en este punto, hay mucha falta de información, que “nos aplicamos el repelente y listos para todo el día”. “No todo el mundo se cuestiona esto y es muy importante. De la misma forma que hemos educado en la reaplicación del fotoprotector solar, hay que educar en la reaplicación del repelente”, pronuncia. Comunica que la duración del efecto varía de cuatro a ocho horas y depende de diversos factores. Uno es el principio activo, puesto que cada uno tiene una efectividad determinada. Otro es la concentración. “Concentraciones menores ofrecen protección de muy corta duración, por lo que se deben revisar las recomendaciones indicadas en el prospecto”, enuncia Gozalo. Por supuesto, el tipo de formulación, ya que las presentaciones microencapsuladas presentan una liberación sostenida que puede alargar la duración del efecto. Otros son la temperatura ambiente, la sudoración, la exposición al agua y el uso de cremas fotoprotectoras. LA UTILIZACIÓN DE UN REPELENTE INCORRECTO NOS PUEDE DAR UNA SENSACIÓN DE FALSA SEGURIDAD

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