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133 La distribución de la de Cártama está pensada para que el cliente, cuando acuda a su establecimiento, se encuentre a gusto, para que sea una experiencia agradable, incluso apetecible. Hay una caja rápida donde se realizan todas las transacciones comerciales. Así, si se tiene prisa y se necesita sólo una pasta dental o una leche para el niño, por ejemplo, no hay que hacer cola. En una zona central se practica una atención más personalizada para cualquier consulta que haya de parafarmacia. Y hay una zona de atención farmacéutica, con una sala privada, para asistir a pacientes con algún problema grave o para desarrollar su servicio de nutrición y el del acompañamiento de la terapia inhalada. En la de Vélez-Málaga están con el proyecto de acometer una obra este año e implementar el mismo concepto de distribución. En la de Cártama tienen robot, pero en la de Vélez-Málaga mantendrán su cajonera asistida por luces LED de colores, que agiliza la dispensación. Giro de proyecto Entre las dos farmacias, son un total de 21 personas trabajando. Han recibido formación por parte de Desirée Ballesteros, Business y Executive Coach, gerente en Farma Emoción. “Viene en un momento en el que acometemos la obra, que ha sido para nosotros un giro de proyecto. Al equipo le gusta, le parece buena idea, pero hay que coordinarlo. Hemos pasado a un proyecto de marca, con unas ideas claras, unos patrones y unos estándares”, explica. Ballesteros fue a ayudarles con el personal, para facilitarles el entender el cambio, y también a ellos mismos, para conocer mejor a su equipo. Igualmente, les ha dado soporte en la parte de la estrategia de la farmacia. “Siempre hemos tenido algo de estrategia, pero es verdad que nos ayuda un poco a coordinarlo mejor. A conocer mejor a cada persona que forma parte del equipo”, insiste Diego Martínez Agüera. A reconocer mejor qué rol dar a cada uno en función de cómo es. Si hay una persona que es más organizada, que se encargue del almacén, de controlar el stock, del cotejo de los productos, de que llegue bien la mercancía y esté colocada. Por otro lado, si hay un conflicto, a mejorar el manejo de ese conflicto y a cómo comunicarse con el resto de las personas. “Hemos mejorado mucho la comunicación del equipo. Una de las armas principales ha sido esa comunicación, esa coordinación, entender el proyecto. Es como que nos ha ayudado a transformarnos, a que esa transformación que se hace en el espacio también la llevemos a cabo en nosotros, en las personas”, declara. Del mismo modo, a él y a sus hermanas, para coordinarse mejor entre los tres, a ponerse un horario. Piensa que la formación ha sido bastante provechosa. Con Ballesteros, comenzaron en abril de 2022, en la farmacia de Cártama, ya que terminaron la obra allí a finales de 2021. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que les hacía falta esta figura y contactaron con ella. En 2023, la han efectuado en la de Vélez-Málaga, junto a la coordinación de él y sus hermanas. Han acabado en este mes de enero. Le pedimos que compendie lo aprendido con Ballesteros. “Nos ha servido para transformarnos como farmacia, porque el proyecto que tenemos entre manos necesitaba ese giro de tuerca que ha venido a darnos. Nos hace ver las cosas de otra manera. Quizás, antes nos encerrábamos en nosotros mismos en vez de verlo de una forma un poco más amplia. Nos ha ayudado, sobre todo, a la hora de comunicar las cosas, a la hora de reconocer qué es lo prioritario, lo urgente, lo que se puede posponer para más adelante”, describe. Les ha posibilitado el hacer un cambio en la manera de trabajar que les hace ser más eficaces y tener una visión mucho más amplia de lo que es el negocio. En definitiva, han realizado una transformación del espacio y se han embarcado en una estrategia profesional de liderazgo. Han aumentado las ventas a través de la formación para dar un buen servicio y consejos. El equipo es gestor de categoría. Las reformas están enfocadas a no tener producto detrás del mostrador. El desencadenante de todo fue que quisieron alquilar el local de al lado de la farmacia de Cártama. Cuando lo consiguieron, apostaron por dar un giro de tuerca y llamaron a una empresa de branding para el desarrollo de marca. “La transformación del espacio comercial fue la consecuencia de nuestra marca. ¿Por qué no hay productos detrás del mostrador? Es una de las cosas que llama mucho la atención. Nosotros entendemos que nuestro consejo es lo primordial. Es decir, la gente viene a nuestra farmacia porque necesita un consejo por cualquier problema. Entonces, lo que queremos que vean es nuestra figura sin nada detrás”, razona. Es como el que va a una consulta del médico, que no tiene todo tipo de productos, de cremas o de lo que sea, detrás. “No queremos que el cliente vea detrás de nosotros un producto, sino que nos vea como una solución a sus problemas”, puntualiza. Lo que hay es imagen de marca. Otra de las cosas que les caracteriza es que todas las transacciones comerciales se hacen en el punto de caja rápida, por lo que el equipo farmacéutico no toca el dinero. “Si yo voy a una consulta de un médico, a la de un dermatólogo, él no me cobra. Yo salgo de la consulta y alguien en la recepción lo hace. Hemos querido llevar esa transacción económica al punto de la caja, donde le van a cobrar a ese cliente, porque mi labor ya ha terminado cuando acaba el consejo”, apunta. Son detalles de marca y “de cuidar lo que es la atención farmacéutica”. Los servicios más destacables por los que están apostando son el de acompañamiento en la terapia inhalada. “Muchos de los pacientes sufren de asma o EPOC y necesitan utilizar aerosoles que, en el mejor de los casos, el médico se los prescribe y les dice cómo utilizarlo sin tener el aparato delante. Después, van a la farmacia a por el medicamento y se les puede explicar, pero hay un gran fracaso terapéutico porque la adherencia al tratamiento suele ser bastante mala. De hecho, según datos oficiales, uno de cada dos asmáticos sufre una crisis de asma al año que acaba en Urgencias. Aquí hay un problema. No puede ser. Es como si un diabético todos los años terminara en el centro de salud por un coma diabético. Hay un gran fracaso y una gran falta de adherencia por el desconocimiento de cómo utilizarlo”, advierte. La labor que realizan es la de explicar bien al paciente ¿POR QUÉ ATARAZANA? La familia Martínez Agüera se identifica mucho con Málaga. Diego Martínez Agüera expone que en las atarazanas de Málaga era donde se fabricaban y se reparaban las naves, los barcos. “A raíz de esas acciones, empezaron a proliferar un montón de comercios, a haber un montón de actividad comercial, de pequeños comercios. Eso le dio vida al puerto de Málaga en su día y convirtió a Málaga en una ciudad portuaria, donde venía gente, se iba gente, llegaba otra. Le dio ese carácter cosmopolita a la ciudad, de ser gente abierta, de ser gente que se embebe de otras culturas, que exporta su propia forma de ser a otro sitio”, relata. Como es algo que les representaba a ellos siendo de Málaga, quisieron hacerlo suyo. Por eso se llaman Atarazana, como algo emblemático de Málaga. En sus dos farmacias cuidan de la salud, reparan la salud, por lo que es un símil perfecto. Concluye que “se trata de que hay una interconexión de disciplinas”. En las atarazanas había una interconexión entre diferentes comercios y aquí hay una interconexión de disciplinas con la que pueden ayudar al paciente a cuidar su salud.

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